En los últimos meses, parece que el crecimiento del empleo ha perdido su importancia, ya que la venta masiva de acciones y los rendimientos EE.UU. más sólidos animan a los inversores a adoptar un enfoque más equilibrado en su asignación. El anuncio de hoy de las Nóminas no agrícolas (PFN, por sus siglas en inglés) no será la excepción, ya que los inversores siguen recargando posiciones de riesgo. A más largo plazo, mantenemos nuestra postura larga sobre el euro.
El billete verde pasó la mayor parte del mes de octubre en un rally, con el índice dólar subiendo más de un 2 % de 95.13 a 97.12. A pesar de que la económica de EE.UU. mostró debilidad, el sentimiento global de aversión al riesgo alentó a los inversores a mantener una postura larga en el dólar. Los datos fueron incluso decepcionantes: La cifra final de agosto de los pedidos de bienes duraderos se situó en un 4,4% mensual, por debajo del 4,6% del mes anterior. La medida se recuperó en septiembre, un 0,8 % frente a un pronóstico mediano -1,5%. Las PNF de septiembre estuvieron muy por debajo del pronóstico mediano (134 000 frente a los 185.000 previstos), mientras que la inflación se redujo al 2,33% anual desde el 2,7% de agosto. Las ventas minoristas cayeron en septiembre, pero una sorpresa al alza en el PIB, un 3,5 % frente al 3,3% esperado, animó a los inversores.