La película tiburón tuvo muchísimo éxito en el año 1975. Imagine la impresión que darían aquellas imágenes. Pues la película provocó que se disminuyera el número de bañistas en las platas de California, aunque la probabilidad de tener un accidente yendo a la playa es mucho mayor que por el ataque de un tiburón.
¿Por qué ocurre esto? Esto ocurre porque nuestro cerebro es subjetivo. Hacemos más caso por los hechos que nos producen un mayor impacto o a los que accedemos más rápidamente antes que tener en cuenta los hechos más probables. Por esto mismo, también se puede entender porque acciones como volar en avión o subirnos en una montaña rusa nos provocan tanto miedo y matan tan poco.
¿Qué tiene esto que ver con nuestro trading?
Existe un ejercicio que nos sirve para demostrar lo condicionado que vivimos en relación con lo que pensamos. Supongan que en una habitación están doce operadores asiduos y forman dos grupos de seis personas. Al primer grupo se le encarga que recuerde y escriba seis operaciones ganadoras y el segundo seis perdedoras. Si preguntamos a los grupos cómo se valoran como trader, del 1 al 10, el primer grupo sacará mayor puntuación ya que al recordar las seis operaciones ganadoras, su percepción mejora al tener la información más reciente.
Y ahora nos preguntamos qué sucedería si hubiéramos pedido al primer grupo que recordara seis operaciones ganadoras y al segundo doce ¿Qué grupo se valoraría mejor? Pues, sorprendentemente, el primer grupo volvería a valorarse mejor. Esto responde a que el segundo tuvo que dedicar más tiempo a encontrar esas doce operaciones ganadoras mientras que el primer grupo las recordó con más facilidad al ser un número menor de casos. Esto demuestra que lo que cuenta en una decisión es la facilidad y no la frecuencia con la que podemos recordar.
Lo que queremos decir con esto es que al no apuntar sus operaciones en un cuaderno de trading su percepción de usted mismo puede llevarle a tomar decisiones erróneas.
En primer lugar, esto se explica porque recordará las malas decisiones con más facilidades que las buenas. Todo el mundo recuerda cuando nos arruinamos por primera vez. Esa acción, aunque no haya mucha probabilidad de que se produzca de nuevo, se nos mete en lo más profundo de nuestras mentes. ¿Cuántas veces un stop le saltó porque el precio le barrió por uno o dos céntimos? Sin embargo, cuantas veces consiguió una altísima rentabilidad o no le salto el stop por uno o dos céntimos ¿Crees que esta última posibilidad es menos probable?
En segundo lugar, considerarás más probable que puedas cometer un error en la siguiente operación si piensas en las últimas operaciones negativas. De igual modo, si se piensas en las ganadoras, el efecto será totalmente distinto ya que se considerará que la siguiente acción será ganadora. Otra cosa que influye es lo que oímos de la radio, personas noticias etc…
Si un compañero trader nos cuenta su pérdida, lo mejor es salir corriendo por que nos puede contagiar ya que perder en grupo nos tranquiliza más. Evite las malas noticias y solo fíjese en las buenas para que su autoestima se vea fortalecida y le ayudará a ser paciente si las cosas no salen como esperamos.
Por último, hay que tener en cuenta que es más difícil de olvidar algo que nos emociona. Seguro que todos recordamos donde estábamos y lo que hacíamos el día que se produjeron los ataques terroristas del 11S pero si le pidiera que describiera las operaciones de la semana pasada le resultaría mucho más difícil. A pesar de que son mucho más recientes las operaciones de la semana pasada, no se accede a la memoria con la facilidad que nos gustaría a esta información.
Por ello, le recomendamos encarecidamente que debe llevar al día su cuaderno de trading para que los fallos de nuestra mente no nos deje engañarnos, ya que se accede con mayor rapidez a las malas operaciones y provoca que baje su autoestima y que dude sobre cada operativa debido al error de disponibilidad. De este modo, antes de comenzar un nuevo día de trading observe las operaciones ganadoras. Así se sentirá más seguro de sí mismo ya que considerara el éxito más probable. Además, la profecía de auto-cumplimiento aumentará efectivamente su tasa de éxito.
Al ser seres racionales debemos buscar opciones que nos eviten caer en las trampas mentales y encontrar a la vez soluciones para buscar nuestro beneficio. La solución es fácil ya que solo se necesita hacer un registro diario de todas nuestras operaciones, lo que nos hace ver nuestra estadística de forma objetiva. Tenemos que tener en cuenta que por mucha memoria que tengamos la mente nos zarandea por igual a todos y hay que ponerle freno.