- Después del lanzamiento del blanqueo para el dinero no declarado, el Gobierno se ocupó de tratar de bajar el precio del dólar “blue” promoviendo subas de tasas para sacar pesos del mercado y presionar a inversores a deshacerse de sus bonos en dólares, aumentar las ventas de bonos por parte de la ANSeS y “manos amigas” vendiendo dólares. Así quedó claro que el Gobierno tomó la decisión de actuar en un mercado al que hasta hace unos días lo consideraba “marginal” o “sin importancia”.
Por su parte, el BCRA, mediante otra acción insólita, obligó en los últimos días a algunos bancos a que le prestaran dólares billetes de sus posiciones, seguramente para no mostrar una mayor caída de sus reservas. Y en el cierre de la semana financiera la atención se volvió a fijar en la cotización del dólar en el mercado paralelo de cambios debido a que en las dos últimas jornadas subió con fuerza, rompiendo diez jornadas continuas sin alzas y cerrando el viernes a $ 8,90 para la compra y a $ 8,95 para la venta. Algunos analistas dijeron que la reacción al alza fue provocada por la decisión, exigida informalmente por el Gobierno, de que las tarjetas de crédito establecieran límites para la extracción de dólares billetes a través de los cajeros automáticos en el exterior.
Al respecto, sorpresivamente, a última hora del viernes pasado se supo que hubo acuerdo para que a partir del inicio de la semana la extracción de adelantos en efectivo en los países limítrofes podrá ser de USD 50 mensuales por cuenta, banco, marca y DNI, mientras que en el resto del mundo será de USD 800 mensuales. Mientras, los bancos perdieron USD 81 millones de depósitos en dólares en la semana del 13 y al 17 de mayo, un promedio de USD 16,2 millones por día, según se desprende de la información difundida por el BCRA. Y otros hechos ocurridos en la semana agregaron nuevos motivos de preocupación e incertidumbre. Al cierre del viernes en el MULC argentino se pudo comprobar que el ente monetario decidió no actuar más en el mercado de futuros, cuando aumentaba la demanda para los últimos tres meses del año a precios realmente subsidiados con tasas de interés implícitas muy por debajo de la inflación real.
También resultó otro hecho llamativo la decisión oficial de fijar el cierre semanal del dólar vendedor de transferencia en $ 5,2660, ajustándolo al alza un 0,6% con respecto al de la anterior y en lo que va del mes un 1,52% (23,2% TNA), siendo éste un récord en el año. El volumen semanal operado entre entidades fue de USD 1.305 millones, con un promedio diario de USD 261 millones, un 15% menor al del similar período anterior. Por su parte, el BCRA compró en el mercado un total de USD 205 millones, pero sus reservas caían USD 43 millones y sumaban al jueves -no se conocieron los datos del viernes- USD 38.776 millones, su nivel más bajo en seis años. En el mercado de futuros de New York el peso/dólar a un año quedó operado a $ 8,0635 (53%).
BUENAS NOTICIAS EN EE.UU. MANTIENEN FIRME AL DOLAR
PANORAMA INTERNACIONAL - El presidente de la Fed, Ben Bernanke, en su comparecencia ante el Congreso estadounidense el miércoles pasado, se refirió a las actuales condiciones del mercado laboral, que "han mostrado recientemente cierta mejoría", pero aún siguen siendo "débiles en general", afirmó. Por esa razón, entonces, dejó claro que por el momento no retirará los estímulos económicos ya que sería demasiado prematuro y peligroso. Tampoco puso fecha exacta para esa retirada, reiterando que dependerá de la evolución de la economía en general y, en particular, de la evolución del empleo.
A ello se agregaron los buenos datos conocidos el jueves y el viernes sobre la economía estadounidense, que mostraron una mejora en el empleo, un importante aumento de las ventas de nuevas viviendas y de los bienes duraderos. El mercado, que ya había reaccionado dando como un hecho el anuncio de Bernanke y descontando que la Fed deje muy pronto sin efecto su actual política de flexibilidad monetaria, reaccionó inmediatamente a favor de las monedas más comprometidas, pero con activos más rentables, y así el euro pudo marcar máximos en la figura de 1,29 dólares.
Otro hecho importante que ocurrió la semana pasada fue que el Parlamento Europeo mostró el miércoles pasado su apoyo a la supervisión única del BCE sobre los bancos europeos con más de 30.000 millones de euros de activos, aunque por ahora no votó una resolución formal. Los diputados de la eurozona están mayoritariamente de acuerdo con las líneas acordadas provisionalmente con el Consejo, esto es, que el BCE supervise directamente las grandes entidades financieras y también sobre el resto. Su principal reclamo, expresado a través de un conjunto de enmiendas, pasa por establecer altos niveles de transparencia y de rendición de cuentas para el nuevo supervisor, quedando bajo la responsabilidad del PE aprobar los nombramientos del presidente y del vicepresidente del órgano supervisor, así como su posible despido.
Por su parte, el Banco de Japón (BOJ) anunció que mantendrá su actual programa de estímulo y que la economía nipona “ha empezado a recuperarse” debido a que las exportaciones, que suponen cerca del 40 % del PIB del país, han dejado de retroceder. Tras su reunión mensual, el Banco de Japón acordó mantener la compra de deuda pública y activos de mayor riesgo hasta duplicar la base monetaria y terminar con la deflación que soporta el país desde hace casi 15 años. Según los analistas técnicos la moneda de la Unión Europea operará con soportes en 1,2857 y 1,2845 y resistencias en 1,3014 y 1,3045 y al cierre del viernes en el mercado de New York cotizaba a USD 1,2930.