La semana que HOY comienza en las bolsas europeas y estadounidenses tendrá como principal foco de atención dos de los factores que más han condicionado el comportamiento de estos mercados en los últimos tiempos: el conflicto comercial entre EE.UU. y China y el Brexit. Sin embargo, en esta ocasión esperamos que estos factores pesen para bien en la evolución de estas bolsas.
Así, el viernes, y tal y como desarrollamos en nuestra sección de Economía y Mercados, EE.UU. y China anunciaron que habían cerrado la “fase uno” del acuerdo comercial, fase que, pendiente de su redacción final, será firmada en el mes de enero. La reacción de los mercados al anuncio fue menos positiva de lo que algunos inversores esperaban, provocando incluso algunas ventas en la bolsa estadounidense. Entendemos que es el típico ejemplo de “comprar con el rumor y vender con la noticia”. En ese sentido, las críticas recibidas por el acuerdo, que consideramos algo mejor que el esperado de “mínimos”, ya que incluye algunos cambios estructurales en la forma de operar de China y alguna retirada parcial de tarifas por parte de EE.UU., no creemos que estén siendo ecuánimes, ya que era evidente que en la “fase uno” ambas potencias no iban a tratar los temas más complejos y que más les distancian.
No obstante, consideramos el acuerdo un paso en la buena dirección, paso que debe servir para rebajar las tensiones comerciales entre ambos países, algo que vendrá bien a los mercados de valores mundiales. A partir de ahora, y como ha expuesto claramente el representante comercial de EE.UU., Lighthizer, el éxito de las negociaciones de la “fase dos” del acuerdo va a depender de quién adopte las decisiones en China: la facción más dura del Gobierno o la facción reformista. Decir, igualmente, que el acuerdo firmado no resuelve ni mucho menos todas las disputas entre ambos países, dejando para más adelante temas importantes que deberán ser negociados, algo que ya se sabía que iba a ser así. Aun así, bienvenido sea el acuerdo ya que, como habíamos señalado en alguno de nuestros comentarios antes del anuncio del mismo, el riesgo de este tema para los mercados era a la baja, siempre que no se alcanzara un acuerdo, ya que los mercados ya venían descontando el mismo desde hace tiempo, lo que ha llevado a los principales índices bursátiles estadounidenses nuevamente a máximos históricos y a los europeos a alcanzar sus niveles más altos del año.
En lo que hace referencia al otro factor, el Brexit, señalar que esperamos que el primer ministro británico, Johnson, presente nuevamente y cuanto antes para su votación en el Parlamento el acuerdo que alcanzó con sus socios de la Unión Europea (UE), que en esta ocasión será aprobado sin problemas por los miembros del parlamento, al haber obtenido los Conservadores una amplia mayoría en las recientes elecciones legislativas. Posteriormente, esperamos que el Gobierno del Reino Unido acelere la aprobación de todos los trámites legales para que, esta vez sí, el país abandone la UE a finales de enero, tal y como estaba previsto. De cara a los mercados, y en el corto plazo, la resolución del proceso es un alivio ya que rebaja sustancialmente la incertidumbre que ha generado el mismo en los últimos años. A partir de ahora, y durante 2020, serán las negociaciones para definir la nueva relación entre el Reino Unido y sus ya ex socios en la UE las que centren la atención de los inversores. Pero esa será otra historia.
Por lo demás, debemos destacar que la semana presenta una agenda macroeconómica intensa, empezando por la de HOY, con la publicación en la Zona Euro, Alemania, Francia, Reino Unido y EE.UU. de las lecturas preliminares de diciembre de los índices adelantados de actividad, los PMIs, de los sectores de las manufacturas y de los servicios. Estos indicadores deberían servir para hacernos una idea de cómo van a cerrar el año las principales economías desarrolladas. En las últimas semanas los datos macro publicados han diferido sensiblemente y para mal de lo indicado por los índices adelantados, tanto de actividad como de confianza. Aun así, una mejora en las lecturas de los PMIs de diciembre en relación a los de los meses precedentes sería bienvenida por los inversores.
Además, MAÑANA se publicarán en EE.UU. las cifras de la producción industrial del mes de noviembre; el miércoles en Alemania los índices IFO de diciembre, que miden el clima empresarial en el país, así como la lectura final de noviembre del IPC de la Zona Euro; y el viernes la lectura adelantada de diciembre del índice de confianza de los consumidores de la Zona Euro, la lectura final de diciembre del índice de sentimiento de los consumidores estadounidenses, así como la lectura final del PIB del tercer trimestre de 2019 de EE.UU. Además, el miércoles (hora de Japón) se conocerá la decisión que adopta el Comité de Política Monetaria del Banco de Japón (BoJ), mientras que el jueves será el Banco de Inglaterra (BoE) el que anuncie la suya. A lo largo de la semana iremos hablando de estos temas.
Para empezar, HOY esperamos que las bolsas europeas abran la sesión sólidamente al alza, en un clima de moderado optimismo tras el anuncio de la “fase uno” del acuerdo comercial entre EE.UU. y China y con el Brexit ya encarrilado. Decir que, a pesar de que ambos temas entendemos que están ya en gran medida descontados por los mercados, su resolución no deja de ser positiva para el devenir de los mismos, al menos en el corto plazo, sobre todo porque reduce en gran medida la incertidumbre y la inquietud que han venido generando entre los inversores.