Los riesgos domésticos para la economía chilena han cobrado importancia en el corto plazo, empujados por el alto dinamismo de la demanda interna y una baja en el desempleo, pero esto no se ha traducido en una mayor presión inflacionaria, dijo el miércoles el presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara.
Desde inicios del año pasado, el ente rector ha mantenido la tasa de interés referencial de la economía en 5 por ciento, con un sesgo neutral, lo que según el organismo le permitiría actuar ante una complicación en el entorno internacional.
“Los riesgos domésticos han ganado importancia, al menos en el corto plazo. Los indicadores de producción y demanda superaron los pronósticos durante el último año”, dijo Vergara en un discurso ante ejecutivos.
La actividad económica chilena creció un 5,6 por ciento en el 2012, apoyada por una sólida demanda interna, y se expandió un 6,7 por ciento en enero, por sobre lo esperado. No obstante, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, dijo en la víspera que se espera una desaceleración en los próximos meses.
En tanto, el Indice de Precios al Consumidor (IPC) subió un 0,2 por ciento en enero, pero la inflación a doce meses fue del 1,6 por ciento, debajo del rango meta del Banco Central (2 a 4 por ciento).
Pese al sesgo neutral de la política monetaria, el jefe del organismo rector dijo que “es importante destacar que en estos días este nivel para la tasa de política es un tanto alta de acuerdo a los estándares internacionales”.
Para analistas, el diferencial de tasas frente a economías desarrolladas propicia el ingreso al país de capitales que buscan mayor rendimiento.
En recientes encuestas realizadas por el organismo rector, el mercado no ve cambios en la tasa clave en el corto plazo pero sí ve un incremento de 25 puntos base en un horizonte de 12 meses.
El funcionario dijo además que bajo ciertas circunstancias el Banco Central podría intervenir en el mercado cambiario ante la fortaleza del peso, que ha ganado un 1,27 por ciento este año tras apreciarse un 8,48 por ciento en el 2012.
No obstante, Vergara resaltó que el sistema de libre flotación es lo más apropiado para Chile, el mayor exportador global de cobre.
La moneda local ha operado en un rango de 472-475 unidades por dólar en las últimas semanas. El mercado cree que una intervención cambiaria podría darse cuando el peso vulnere las 465 unidades.
En el 2011, el Banco Central intervino en el mercado cambiario con compras por 12.000 millones de dólares cuando el tipo de cambio alcanzó los 465,50 pesos.