Las acciones de Nestlé (VX:NESN) han superado el rendimiento del mercado de acciones global ante su robusto y predicable negocio, haciendo que los inversores vean en Nestlé cierto refugio.
No obstante, el rendimiento desde 2011 se ha vuelto más plano ya que los mercados emergentes (que suponen el 43% de los ingresos) se han debilitado ante un dólar estadounidense más fuerte, sin olvidar además la desaceleración de China.
La deflación de los precios de alimentos y las grandes inversiones también han frenado el crecimiento orgánico de los ingresos y los beneficios de operación.
Nestlé crece a un ritmo más lento que con anterioridad y no ha elevado sustancialmente su generación de flujo de efectivo, pero aun así las acciones de la empresa cuentan con las valoraciones más altas en los últimos 10 años.
Gestión de la estrategia:
Nestlé está valorada en un EV/Ebitda adelantado a 12 meses de 13,7x, lo que supone un 20% de la prima de la media histórica desde 2006. La valoración también representa un 42% de la prima frente a sus pares; no obstante, Nestlé siempre ha negociado a una prima de sus homólogos.
La generación de flujo de caja no ha cambiado desde 2006 y la línea alta de crecimiento es más baja, por lo que el 20% del aumento en la valoración parece más como un refugio seguro para los inversores globales que buscan la estabilidad en sus carteras de renta variable.
Riesgos clave: si vemos un dólar estadounidense más débil, elevaría las condiciones económicas en los mercados emergentes, mientras que probablemente aumentaría el precio de los alimentos.
Por su parte, un CNY más fuerte aumentaría las cifras de crecimiento de China (el 8-10% de los ingresos de Nestlé vienen de China).
Parámetros de la estrategia:
Entrada: vender Nestlé a mercado con un trailing stop.
Stop: el precio de stop se establece en 76,47 en pasos de 0,65.
Objetivos: tenemos un objetivo de 60, pero puede variar debido a los próximos datos que se conozcan.