El año del gigante del video en streaming Netflix Inc. (NASDAQ:NFLX) ha sido inusualmente aburrido. Sus acciones no han hecho nada por los inversores en los últimos 12 meses, suscitando preocupaciones en torno a que la productora de algunas de las series más populares puede haber dejado atrás la mejor parte de su actual ciclo de crecimiento.
Ascendiendo a 380,55 dólares al cierre del viernes, las acciones de Netflix han descendido un 9% en los últimos 12 meses tras registrar máximos históricos en 423,19 dólares en junio de 2018. En la década anterior, la empresa que ha evolucionado de un negocio de alquiler de video ha devuelto beneficios inimaginables a los inversores. Sus acciones se han disparado cerca de un 6.000% en 10 años.
No es inusual que las empresas tecnológicas pierdan fuelle y dejen de mostrar el nivel de crecimiento que los mercados habían esperado, lo que a menudo tiene un resultado bajista. En el caso de Netflix, sin embargo, el actual debilitamiento es más pronunciado debido al panorama competitivo rápidamente cambiante. Estas son las tres mayores amenazas que, en nuestra opinión, tienen a las acciones de Netflix sometidas a una gran presión:
1. Llega la competencia
La competencia de Netflix sin duda está aumentando y la empresa ha empezado a verle las orejas al lobo. El mayor desafío, a nuestro juicio, vendrá del gigante del entretenimiento mundial Walt Disney Company (NYSE:DIS) que está construyendo un fondo de reservas, armándose para defenderse de sus rivales en el mercado del video en streaming tras una persistente tendencia a la baja del negocio de la televisión por cable.
Disney anunció en abril que competirá con Netflix con su Disney+ app, que se lanzará en Estados Unidos el 12 de noviembre, a 6,99 dólares mensuales, la mitad del precio de Netflix. Ofrecerá la programación de las principales franquicias de Disney, como Star Wars y Marvel Studios, además de su programación original nueva. El servicio probablemente contará con entre 60 y 90 millones de suscriptores al final del año fiscal 2024.
Disney dijo que este año registrará unos 150 millones de dólares en ingresos operativos tras reducir las licencias para los servicios de la competencia como Netflix. Capitana Marvel, la superproducción de superhéroes, es la primera película de Disney en años que nunca estará disponible en Netflix.
La semana pasada, NBCUniversal anunció que planea retirar de Netflix la popular sitcom The Office, que empezará a emitirse en su propia plataforma online en 2021. The Office es la serie con más reproducciones en Netflix y ha supuesto más de 52.000 millones de minutos de visionado el año pasado, según NBCUniversal, una unidad de Comcast Corp (NASDAQ:CMCSA).
En el negocio del streaming, donde cada vez hay más competencia, Apple Inc. (NASDAQ:AAPL) y Amazon (NASDAQ:AMZN) también tienen grandes planes para hacerse con un buen espacio en el sector del streaming. En marzo, Apple dio a conocer un servicio de contenido original llamado Apple TV+ una aplicación de TV renovada y un servicio de canales de Apple TV para acceder a proveedores externos como HBO, Showtime y Starz.
2. Aumenta la quema de efectivo
Toda esta competencia nueva significa que Netflix tendrá que gastar más para crear programación original y comercializar ese contenido más agresivamente para mantener el ritmo de suscripción de nuevos abonados que pronto serán bombardeados con nuevas ofertas y opciones atractivas.
El año pasado, Netflix gastó más de 12.000 millones de dólares en la compra, licencia y producción de contenidos. Este año, se espera que esa cifra ascienda a 15.000 millones de dólares, pues la empresa ha destinado al marketing 2.900 millones de dólares más. Estos costes se producen en un momento en que Netflix espera registrar 20.200 millones de dólares en ingresos en 2019, según los analistas encuestados por Refinitiv.
Desde mediados de 2014, el flujo de efectivo Netflix ha sido negativo, una persistente preocupación para los bajistas que creen que Netflix no está siquiera cerca de un flujo de efectivo positivo, y que la realidad pronto acechará a los alcistas.
"Hay competidores con mucho dinero que van a contratar a los mismos productores y crear contenido atractivo. Por eso, no tienen un foso como Amazon. No tienen un foso como Google (NASDAQ:GOOGL)”, ha dicho Andrew Left, vendedor en corto que ha apostado con éxito contra las acciones de empresas como Valeant Pharmaceuticals (NYSE:BHC), en un programa de la CNBC.
3. Estancamiento del crecimiento en los mercados nacionales
El otro gran reto para el servicio de streaming es cómo estimular el crecimiento cuando los inversores están impacientes por ver una rentabilidad.
Tras la subida de los precios en algunos de sus principales territorios este año, Netflix prevé un aumento de 5 millones de clientes nuevos en el segundo trimestre que finalizaba el 30 de junio, muy por debajo de las previsiones de Wall Street que hablaban de 6,09 millones. La empresa atribuyó la ralentización en parte al encarecimiento de sus ofertas.
Aunque las subidas de precio deberían ayudar a mejorar Netflix, tienen lugar en un momento en el que los competidores en el entorno del streaming se preparan para hacer el mercado más competitivo. ¿Qué pasa si el crecimiento de suscriptores en su mercado más lucrativo, América del Norte, sigue ralentizándose y la empresa sigue dilapidando efectivo cada año para cubrir la diminución de su éxito? A los inversores les resultaría difícil ignorar una mezcla de ese tipo y las acciones de la empresa tarde o temprano reflejarían esa realidad.
En conclusión
El viaje al alza de las acciones de Netflix ha transcurrido en gran parte sin obstáculos en la última década. Pero con el aumento de la competencia, el aumento de los costes y la saturación del mercado, será cada vez más difícil para el gigante del streaming repetir ese rendimiento. Los resultados trimestrales de la empresa, que se publican el 17 de julio, ofrecerán una visión más clara sobre estos riesgos potenciales.