En el largo plazo, la acción de Oracle (NYSE:ORCL) ha mostrado una sólida tendencia alcista, alcanzando máximos históricos desde el impulso que comenzó en octubre de 2022. Durante este periodo, el precio de la acción llegó a los $160.54, consolidándose como uno de los niveles más altos registrados en su historia. Esta fuerte subida ha sido respaldada por un contexto favorable para la compañía, lo que ha impulsado su cotización de manera constante.
En el mediano plazo, específicamente en junio de 2024, Oracle logró superar una resistencia clave situada en los $126, lo que confirmó la continuación de su estructura alcista. Esta ruptura fue un indicativo de que el precio tenía más potencial para seguir subiendo, haciendo plausible la expectativa de mayores alzas en las próximas semanas o meses.
A corto plazo, la acción ha mantenido su impulso alcista, rompiendo una estructura de mediano plazo y una resistencia semanal en los $146.
Esta ruptura se dio a través de un gap alcista, lo que suele ser una señal de fortaleza en el mercado. Sin embargo, tras este fuerte movimiento, es posible que se presente una corrección en el precio, lo que abriría oportunidades para continuar comprando. Los objetivos a corto plazo se sitúan en torno a los $166, lo que sugiere que aún hay margen para nuevas subidas una vez que el precio encuentre soporte tras una eventual caída correctiva.