Hay que remontarse varios meses atrás para encontrar una jornada tan negativa. En muchas ocasiones es difícil determinar cuáles son las razones que inundan el mercado de pánico. Una de ellas bien podría ser la suspensión de cotización de la entidad financiera portuguesa Banco Espirito Santo (LISBON:BES).
Aunque no la única, quizás el BES fue el que encendió la mecha, y el miedo hizo el resto. No recordábamos una situación parecida desde 2011. Al final, el efecto contagio y el temor de perder todo lo ganado en los últimos meses provocó ventas agresivas hasta la apertura americana.
A pesar de llevar tiempo arrastrado problemas, la situación de banco luso explotó esta misma semana a causa de una serie de irregularidades contables. Antes de ser suspendido de cotización arrastraba descensos del 17% y durante la última semana, más del 50%.
Obviamente, el índice portugués fue el que más lo notó, dada la fuerte ponderación del banco. Pero estas dudas bancarias se contagiaron rápidamente por las plazas europeas, en una jornada que parecía no tener tope.
Fue Wall Street la única que pudo cortar la hemorragia, a pesar de abrir condicionada a las bajadas en Europa, supo sobreponerse y acabar perdiendo menos de la mitad que en la apertura.
La pregunta clave ahora es: ¿Qué nos espera a partir de ahora? Lo único seguro son las dudas. Porque por un lado lo lógico es pensar que poco a poco recuperaremos la senda alcista pero, después de ver la violencia de las bajadas de esta semana, por lo menos tomaremos decisiones con la máxima precaución.
Para lo que queda de sesión no esperamos ningún dato de calado, ni de ninguna declaración para animar al mercado. Por lo que es probable que sea una sesión tranquila, donde se recuperen niveles clave, para iniciar la semana que viene con la misma incertidumbre que esta.
Noticias
- Los bonos del tesoro americano consiguen la mayor subida semanal en cuatro meses con los problemas de deuda europeos originados por el banco Espiritu Santo que han incentivado la entrada de capitales en activos más seguros.
- El barril WTI se dirige a una tercera semana de caídas después de que Libia incrementara su producción de crudo y tras el aumento de los inventarios de petroleo en EE.UU. esta semana.
- Estados Unidos trata de reforzar su relación con Alemania después de que estos últimos descubrieran y expulsaran a otro presunto espía americano. Los sonoros casos de espionaje han lastrado las relaciones y han minado la confianza entre ambas administraciones, que ahora buscan la manera de volver a unir fuerzas y recuperar la confianza perdida. La economía europea necesita mantener a EE.UU. como aliado para evitar problemas futuros.
- Las acciones europeas suben de nuevo, a medida que el Euro Stoxx 600 freno su caída semanal, rebotando tras la preocupación de los países periféricos.
- El yen iba camino de acabar la semana más arriba el viernes, tras haber saltado el pico de los últimos 5 meses contra el euro durante la noches debido a que la situación de la banca en Portugal condujo las acciones a la baja de forma global y subió la demanda de monedas refugio.