Hablamos con frecuencia que en realidad ganar dinero en los mercados es más una cuestión de valentía y disciplina que de inteligencia. Si tenemos estadísticas que nos dicen que la caída media de un mercado bajista es del 34 %, muy mal tiene que darse para que compremos cuando cae por ejemplo un 25 % y nos salga mal la jugada. Nos referimos por supuesto al largo plazo.
Lo que ocurre es bien sencillo: hace falta echarle valentía para comprar cuando el mercado ha caído un 25 %, porque el ambiente en esos casos suele ser terriblemente pesimista. Y ahora con tanta gente —incluidos muchos profesionales— tratando de llamar la atención en las redes generando miedo, mucho más. La solución suele ser perder el primer euro, es decir, no entrar en esos momentos de máximo pesimismo, porque es casi imposible que la mayoría de la gente tenga el valor —o la salud— para hacerlo, pero sí puede entrar cuando se haya reducido el chaparrón.
Un ejemplo de esta situación lo tenemos en los valores tecnológicos. Pocas veces dan la oportunidad de ser comprados en rebajas. Son negocios únicos, en muchos casos auténticos monopolios, y muchos tienen capacidad de crecimiento. Esta definición valdría para bastantes de los que aparecen en el gráfico n.º 3 y para muchos más en el caso de las pymes más innovadoras.
Gráfico n.º 3: Destrucción de valor bursátil en las grandes tecnológicas en 2022
Viendo la mala prensa que tiene ahora mismo el sector tecnológico, podría pensarse que se ha producido una fuerte bajada de su nivel de ingresos. Nada más lejos de la realidad. Como vemos en el gráfico número 4, “blue chips” como Microsoft (NASDAQ:MSFT) siguen generando un impresionante flujo de caja.
Gráfico n.º 4: Flujo de caja de Microsoft
Otro ejemplo: el consenso en relación con el futuro de Meta, la compañía matriz de Facebook (NASDAQ:META), era generalizado, por no decir que total. Pero recientemente publicó resultados y no solo fueron mejores de lo esperado, sino que además anunció un proceso de recompra de acciones. El dato del gráfico número tres es del cierre del año pasado y con la subida que ha tenido la bolsa norteamericana al inicio del año en algunos casos la oportunidad se ha reducido, pero siguen de rebajas.
No son las rebajas por liquidación de negocio que vimos en las fechas del gráfico, pero las cotizaciones actuales siguen siendo de rebajas. Y, con el timing adecuado para entrar con seguridad, deberían ser aprovechadas, porque probablemente dentro de dos o cinco años, cuando se vea el gráfico se recuerde con nostalgia. Salvo que se haya sabido aprovechar la oportunidad.