Donald Trump está a punto de dar el discurso más importante (al menos para los mercados financieros) desde que asumió el cargo. De hecho, los inversores están esperando impacientes que el presidente, finalmente, explique su plan en relación con el gasto fiscal y los recortes de impuestos. Las acciones de todo el mundo han estado subiendo fuertemente durante las últimas semanas; los índices de Estados Unidos superan niveles récord día tras día. Los próximos días serán, por lo tanto, una verdadera mina para los inversores.
Por un lado, las expectativas del mercado son muy altas. Sin embargo, también es alta la probabilidad de que Trump defraude fuertemente al mercado. Por otra parte, los inversores no dudarán en recargar las posiciones largas, si Trump enuncia medidas drásticas.
Las acciones operan con oscilación en el inicio de la semana, ya que los inversores no saben en qué dirección soplará el viento. Los mercados regionales asiáticos operaron en general en terreno negativo; el Nikkei bajó un 0,91%, mientras que en China continental el CSI 300 cayó un 0,89%.
Al otro lado del Atlántico, las acciones europeas comenzaron la semana con una base más firme; el Euro Stoxx 50 aumento el 0,30%. A pesar de este cuadro tranquilizador, la volatilidad va en aumento desde el viernes, lo que sugiere que los inversores se están poniendo nerviosos. En los mercados de divisas, la mayoría de los pares operan con inestabilidad, esta mañana.