Una fuerte corrección bajista experimentó el dólar en todos los frentes el jueves, ante la publicación de varios datos e informes.
La baja de la moneda norteamericana se inició con los anuncios de política monetaria del Banco Central Europeo. Si bien fue recortada la tasa de interés interbancaria a un valor negativo más bajo aún que el anterior (del -0,2 al 0,3%), el plan de compra de activos de la entidad no fue modificado en los montos, que se mantienen en 60 mil millones de euros mensuales, y solo fue extendido en sus plazos.
Todo esto explica el movimiento tan fuerte que presentó el euro el jueves, con un nuevo mínimo de marzo de este año en 1,05, y que terminó siendo el punto de partida para un recorrido alcista, cuya amplitud (casi 500 puntos), no tiene antecedentes en los últimos años.
¿Cambia el panorama del euro para los próximos tiempos? No lo creemos. La moneda única aún sigue en una tendencia bajista muy marcada, y si bien no se amplía la base del plan de estímulo, 60 mil millones de euros mensuales es una cifra más que respetable para el futuro, sobre todo en momentos en que la Eurozona no pasa por una buena época.
Y si le sumamos un inminente aumento de tipos de interés por parte de la Fed, que le dará fuerza al dólar, la baja del euro se hará inevitable. Eso sí, con demoras; más de las que creíamos podía tener.
Pero un ISM de servicios muy por debajo de lo esperado terminó por sellar un día realmente negativo para el dólar. Los 55 puntos del índice reflejan que las cosas no están tan bien, y que probablemente la primera economía del mundo siga sufriendo unos cuantos sustos. Todo esto enmarcada en una franca recuperación de la misma, por supuesto, como lo reflejan otras cifras más alentadoras, como las de empleo.
Y precisamente allí radica la importancia de los datos que se conocerán a las 8:30 del viernes. La cifra de empleos de noviembre definirá la contienda del día y también la de las próximas jornadas. Y no será fácil que los 271 mil nuevos puestos de trabajo del mes de octubre sean superados.
Claro que es ahora donde uno se pregunta cual es el criterio que utilizan los analistas cuyo consenso se utiliza para establecer el pronóstico previo sobre los datos. Los más que gruesos errores que presentan estos pronósticos respecto a las cifras publicadas sugieren que la metodología aplicada es incorrecta si se la evalúa con buena voluntad.
Con el criterio empleado, las cifras de octubre estuvieron unos 90 mil empleos por encima de lo estimado. Es algo lógico que decenas de economistas especializados en la materia se equivoquen en casi un tercio de la cantidad de gente que se empleó en un solo mes? Lo es, acaso, errar en 60 mil puestos de trabajo, pero esta vez de más, como sucedió a inicios de octubre, con los datos de septiembre?
Con las dudas que genera todo esto, creemos que es mejor guiarse por otros parámetros: se sabe que una cifra superior a los 200 mil puestos de trabajo mensuales es bien vista en los mercados, ya que cubre el aumento de demanda laboral por crecimiento demográfico y también estabiliza la variable del trabajo en general. Asoma más lógico creer en estas cifras, que esperar una publicación cuyo pronóstico previo luce cada vez más como una manipulación de datos. Si hay que ayudar al dólar, los pronósticos serán negativos; de lo contrario, las estimaciones serán muy positivas, y las cifras decepcionantes.
Y en días como estos, y más precisamente en una semana que no termina bien para el dólar,la generación de empleos bien podría ofrecer cifras magras, aún cuando la tasa de desempleo se mantenga en el 5%. Será así? en un rato lo sabremos.