El yen, que llegó a primera hora a 122,04, recuperó buena parte de su pérdida, aunque no cambia, por supuesto, su sesgo bajista de corto plazo. El Banco de Japón (BoJ) no parece estar muy cómodo con un yen tan bajo, más aún cuando colocó trillones de yenes en el circuito económico, buscando incentivar el consumo y un aumento moderado de la inflación.