¡Fiesta en Jackson Hole!

¿Qué sucede cuando llevas a un puñado de peces gordos a un pueblecito en las montañas de Wyoming? Pues de hecho no lo sé, pero a mi no me parece muy divertido… Seguramente es por eso por lo que el aún presidente de la Fed, Bernanke, ha decidido saltarse la cumbre por primera vez desde que se convirtió en el banquero más importante del mundo. O puede que sea porque su mandato está a punto de terminar y otros banqueros tienen prisa por ver su cabeza en bandeja.

Sin embargo, las cosas no cambiarán mucho con la presencia de Bernanke, pues la política monetaria en EE UU hace lo que le parece y que los que vengan detrás arreglen el desaguisado. Es lo que vemos hoy en los mercados emergentes, ya que otra de las estrellas de la reunión, Tombini, presidente del banco central de Brasil, ha decidido y quedarse en casa para controlar la situación de la divisa, ya que el real brasileño se halla en mínimos de cuatro años, y aprovechar que todo el mundo está fuera para lanzar un programa de intervención de 60.000 millones de dólares.

Hoy oiremos un par discursos más. Martin Weale, del Banco de Inglaterra, dijo ayer que podría ser necesario ampliar las medidas de flexibilización cuantitativa, incluso con forward guidance. La caída de la libra de ayer se atribuyen a estas declaraciones. Los mercados interpretaron que sigue habiendo un sentimiento más bien “dovish” en el Banco de Inglaterra, de modo que la libra esterlina se paseó por la parte inferior de los gráficos de divisas.

Uno de los que van a hablar hoy es Kuroda, del Banco de Japón, que seguramente defenderá sus políticas. El USD/JPY se ha operado al alza hasta el nivel de 99.Ayer salió Nowotny, del BCE, quien dijo que las últimas noticias positivas de la economía del continente hacen innecesaria una nueva bajada de tipos. Esto ayudó a mantener la fortaleza del euro. Justo esta mañana hemos conocido el PIB alemán, que se ha situado en previsiones (0,9%) y no por debajo de las mismas, lo que ha aupado al eurodólar hasta el nivel de 1,3365.

Mejor fue en Gran Bretaña, donde el PIB resultó ser mejor de lo esperado, con una subida del 0,7% frente al esperado 0,6%. Puede que el intento de Weale de depreciar la libra fuera efectivo, ya que el cable se situó en 1,5625. Cierto que la recuperación del Reino Unido es un hecho, pero los banqueros centrales saben del peligro de una divisas demasiado fuerte, y de ahí las palabras de Weale.

En EE UU, la noticia más importante de ayer fue el parón del Nasdaq por causas técnicas. Este es el peligro de depender en tan alta medida de sistemas tecnológicamente avanzados, aunque el índice pudo recuperar posiciones antes del cierre y las bolsas cerraron en verde. Esta mañana conoceremos también el dato de ventas de viviendas de primera mano.

En cuanto al aussie y a su vecino, el kiwi, ambas divisas se estabilizaron tras las actas de la Fed, ya que se ha esfumado el fantasma de la bajada de tipos, pero ya veremos qué sucede con el loonie, el dólar canadiense. Ayer, el CAD cayó a causa del mal dato de ventas minoristas, con un –0,7% frente al esperado –0,4%, y se situó en 1,0570. Hoy conoceremos el IPC, que podría ser la respuesta a lo que esperan los alcistas del CAD, si es que resulta por encima de previsiones. Se espera un aumento del 1,4%, aunque hay otros datos económicos en Canadá que no son tan optimistas, y puede que la inflación deba recuperarse un poco para que este dato sea capaz de mover el mercado.

Uno de los peligros de las cumbres como las de Jackson Hole es que puedan interpretarse mal las palabras de los dignatarios extranjeros que se decidan a hablar, en especial los que no saben ingles. Cierto que esto siempre puede pasar en cualquier contexto, pero se supone que Jackson Hole es una especie de “reunión de cerebros” más informal, de modo que puede que se les sorprenda con la guardia baja.

El mercado depende hoy en gran medida de todas y cada una de las palabras de estos personajes, de modo que hoy es más necesario que nunca tener un mensaje claro. Los mercados han actuado de un modo un tanto extraño desde que se hicieron públicas las actas de la Fed y los inversores aun no han decidido qué es realmente lo que está sucediendo.

El problema es este: tampoco estoy seguro de que todos estos cerebritos reunidos en Jackson Hole sepan mucho más…