Por Roberto Samora
SAO PAULO, 12 ene (Reuters) - La cosecha brasileña de soja de este año alcanzaría un récord de 152,6 millones de toneladas, según un sondeo de la asociación industrial Abiove publicado el jueves, que ajustó a la baja la proyección respecto a la estimación de diciembre de 153,5 millones de toneladas.
Si se cumplen las previsiones, Brasil cosecharía unos 24 millones de toneladas más que en la campaña anterior, ya que los productores han aumentado la superficie plantada y deberían esperar mejores rendimientos, después de que una sequía redujera gravemente el rendimiento de los cultivos en 2022 en el Sur.
Las expectativas de exportación para el país, el mayor productor y exportador mundial de soja, se redujeron en 1 millón de toneladas hasta los 92 millones de toneladas en 2023, lo que igualmente supondría un nuevo récord, superando los 86,1 millones de toneladas de 2021 y los 78,9 millones de toneladas de 2022.
Una mayor cosecha debería permitir que las exportaciones del complejo sojero (grano, harina y aceite) cierren 2023 con un récord de 64.900 millones de dólares, frente a los 60.900 millones de 2022. La oleaginosa es el principal producto de las ventas exteriores del país.
A pesar de la caída en los volúmenes vendidos el año pasado, las cifras finales de exportación superaron las expectativas, lo que redujo las existencias iniciales disponibles para los envíos a principios de 2023.
Las existencias iniciales de soja de Brasil en 2023 se estimaron en 1,64 millones de toneladas, por debajo de los 3,36 millones de toneladas de las previsiones de diciembre y de los más de 5 millones de toneladas de 2022.
La Asociación Brasileña de las Industrias de Aceites Vegetales (Abiove) también mantuvo su previsión de procesamiento del grano en Brasil en 52,5 millones de toneladas, la mayor registrada en toda la serie histórica.
En 2022, el procesamiento fue de 50,4 millones de toneladas, con un volumen récord de 20,4 millones de toneladas destinadas a la exportación.
Los envíos de aceite de soja al exterior cerraron 2022 en 2,6 millones de toneladas, el segundo mayor volumen de la historia y un 58% más que en 2021, sólo superado por los 2,7 millones de 2005, con el país apoyándose en la fuerte demanda de India, que ha buscado más producto en Brasil para hacer frente a una menor oferta de aceites importados de palma y girasol.
Para 2023, Abiove prevé una caída de los envíos de aceite de soja a niveles más cercanos a los de años anteriores, de 1,75 millones de toneladas, excepto para 2022. En el caso de la harina de soja, los envíos al extranjero deberían mantenerse cerca de los 20 millones de toneladas.
(Editado en español por Javier Leira)