Buenos Aires, 4 jun (EFE).- La filial de Volkswagen en Argentina
confirmó hoy que este año comenzará a fabricar en este país una
nueva camioneta llamada Amarok, la primera "pick up" que produce la
multinacional alemana.
La automotriz invirtió 1.300 millones de pesos (345,7 millones de
dólares) para adecuar su planta de la periferia de Buenos Aires a
los requerimientos para la producción del vehículo todoterreno, que
será presentado formalmente en diciembre próximo y saldrá a la venta
a partir de enero.
"Estoy muy orgulloso", dijo el gerente general de la filial local
de Volkswagen, José Demarco, quien destacó que la camioneta será "un
producto mundial producido en Argentina, pilotado por argentinos
para el mundo".
En la lengua de la etnia indígena inuit, originaria del norte de
Canadá y Groenlandia, "amarok" significa lobo, animal que para los
esquimales es el rey del mundo salvaje por su fuerza, resistencia y
supremacía.
"Este nombre se ajusta de manera excelente a las características
de nuestra 'pick up', que se convertirá en un referente del
segmento. Hemos escogido este nombre, que se aplicará en todo el
mundo, con el mayor esmero", señaló a su vez Stephan Schaller,
responsable de la división de vehículos industriales de Volkswagen.
Para el directivo, "la Amarok debe despertar asociaciones
positivas en los principales mercados internacionales, así como
destacarse, desde su lanzamiento, entre los competidores".
En el primer trimestre de 2010 la todoterreno se comercializará
en Suramérica y Centroamérica, para luego llegar a Rusia, Australia
y diferentes naciones de Europa y África, informaron autoridades de
la automotriz en una rueda de prensa.
A finales de mayo último Volkswagen se convirtió en la fabricante
de automóviles más subsidiada de Argentina, tras recibir el primer
desembolso de dinero estatal para completar el salario de su
personal en la fábrica de cajas de cambios que la multinacional
alemana tiene en el centro del país.
Al plan para paliar el impacto de la crisis global en la
industria automotriz local también se han sumado las filiales de la
francesa Peugeot, la italiana Iveco y la estadounidense Ford, que se
comprometieron a no despedir empleados. EFE