Fráncfort (Alemania), 6 jul (EFE).- El Banco Central Europeo (BCE) subirá mañana, previsiblemente, los tipos de interés de forma moderada hasta el 1,5 % pese a la crisis de endeudamiento en la zona del euro.
Varios miembros del consejo de gobierno del BCE han hecho hincapié en que existen presiones inflacionistas y que la entidad actuará para lograr su objetivo de mantener la tasa de inflación en un nivel inferior, aunque próximo al 2 % a medio plazo.
La inflación interanual en la zona del euro se mantuvo en junio en el 2,7 %, respecto al mes anterior, según el cálculo rápido de Eurostat, la oficina estadística europea.
El Banco Popular de China (central) subió los tipos básicos de interés en préstamos y depósitos en un cuarto de punto, la tercera alza en lo que va de año, hasta el 6,45 % y el 3,5 % respectivamente.
El Nadorovy Bank Polski (banco central de Polonia) mantuvo su tasa rectora en el 4,5 %.
El Riksbank (banco central de Suecia) subió esta semana su tasa rectora por séptima vez consecutiva en 25 puntos básicos hasta el 2 %.
Los expertos de UniCredit consideran que las tensiones en los mercados financieros han disminuido considerablemente después de que Grecia aprobara el plan de austeridad.
Los mercados prestarán atención a los comentarios del presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, sobre los próximos movimientos en los tipos de interés a lo largo del año.
Trichet se pronunciará también en la rueda de prensa sobre el nuevo paquete de rescate para Grecia, la contribución de los acreedores privados y las últimas decisiones de las agencias de calificación de riesgos.
La agencia de medición de riesgo Moody's rebajó ayer cuatro peldaños la calificación de la deuda de Portugal hasta el nivel de bono basura Ba2 debido al "creciente riesgo" de que el país incumpla su reducción del déficit y tenga que pedir más ayuda.
Ya son dos países de la zona del euro, Grecia y Portugal, los que han sido degradados hasta ese nivel, lo que les hará más difícil y más caro encontrar financiación en los mercados.
Un día después de la decisión de Moody's, Portugal no llegó a colocar los mil millones de euros que tenía previstos en una subasta de deuda en la que vendió 848 millones a tres meses a un interés del 4,92 %, mayor que en la anterior (4,86 %).
La agencia de calificación de riesgo Standard & Poors (S&P) ha señalado que las opciones de financiación consideradas por los bancos franceses para Grecia podrían implicar un impago efectivo o insolvencia.
El BCE se ha mostrado partidario de que los bancos acreedores participen en el rescate financiero de Grecia mediante una renovación voluntaria de los bonos cuando venzan pero se opone a cualquier tipo de reestructuración de la deuda.
La entidad monetaria europea ha hecho hincapié en que no aceptará la deuda griega en caso de que se produzca un impago, lo que tendría severas consecuencias para los bancos griegos muy dependientes de la liquidez del BCE.
La rentabilidad de la deuda portuguesa a diez años subió con fuerza hasta el 12,94 % , la de la griega hasta el 16,27 % y la de la española hasta el 5,58 %.
El interés de los bonos alemanes a diez años se situaba en el 2,917 %. EFE