Nueva York, 3 jun (EFE).- Un tribunal federal de apelaciones de
Nueva York ha aceptado escuchar las objeciones de un grupo de fondos
de pensiones de Indiana (Estados Unidos) a la venta de activos de
Chrysler a la italiana Fiat, informaron hoy medios estadounidenses.
El tribunal fijó una vista oral para el viernes 5 de junio, con
el fin de escuchar los argumentos de las partes implicadas, lo que
podría retrasar por unos días el final del proceso de reorganización
que realiza la empresa estadounidense bajo supervisión judicial.
Los fondos, que representan los intereses de policías y maestros
de Indiana, entre otros colectivos, compraron hace casi un año 42 de
los 6.900 millones de dólares de deuda emitida por la empresa
estadounidense, según recuerda The Wall Street Journal.
Richard Mourdock, encargado de gestionar esos fondos, se mostró
satisfecho con la decisión del Tribunal federal de Apelación en
Nueva York, según añade The New York Times, y señaló que los
jubilados y los contribuyentes de ese estado han sufrido pérdidas "a
causa de actos ilegales y sin precedentes" del Gobierno federal.
Los fondos cuestionan la labor del Ejecutivo estadounidense al
autorizar el acuerdo de fusión entre Chrysler y Fiat, y que
previamente concediera al primero 8.000 millones de dólares para que
saneara sus cuentas.
El juez del Tribunal de Bancarrota en Nueva York Arthur González
autorizó el pasado fin de semana el traspaso de los activos de
Chrysler al grupo que surja de la fusión con la italiana Fiat y
señaló que esa transacción "es la única alternativa viable y la
mejor opción posible ante la liquidación de la empresa".
El nuevo grupo que saldrá de la reorganización estará controlado
en un 55% por una sociedad fiduciaria vinculada al sindicato United
Auto Workers (UAW), en tanto que Fiat controlará un 20%, que podrá
crecer hasta el 35% si se logran ciertos objetivos.
El fabricante estadounidense de automóviles se declaró en
bancarrota el 30 de abril después de que un grupo de acreedores se
negara a cancelar 6.900 millones de dólares de deuda a cambio de
recibir 2.000 millones en metálico. EFE