Teherán, 10 feb (EFE).- La industria del petróleo de Irán requiere hasta 200.000 millones de dólares en inversiones tanto en los sectores de producción como para el refinado y la venta, dinero que pretende obtener a través de inversores extranjeros, informó el ministro de Petróleo del país, Bijan Zangané.
Según informa hoy la agencia iraní de información económica Shana, el ministro subrayó que los recursos actuales con los que cuenta el país no son suficientes para cubrir las necesidades de esta industria y que por eso el Gobierno está trabajando desde hace meses en poder asegurar el flujo de inversión exterior.
"Para desarrollar los campos de petróleo e impulsar la recuperación de crudo de las reservas, así como para asegurar nuestros objetivos de desarrollo, necesitamos una inversión de 200.000 millones. Los nuevos contratos petroleros que hemos preparado fueron hechos con ese objetivo, el de materializar esa cifra con la firma de nuevos acuerdos", añadió el ministro.
Zangané cifró en 130.000 millones el dinero necesario para el sector de la producción, exploración y desarrollo de nuevos campos y otros 70.000 millones para el sector petroquímico, la construcción de nuevas refinerías y la renovación de los campos ya existentes.
El ministro además defendió con vigor la participación de empresas extranjeras en el sector del petróleo iraní en respuesta a las críticas recibidas por los sectores más duros del régimen, que han llegado a calificar de "traición" el contenido del nuevos Contrato de Petróleo de Irán (CPI) que el Gobierno presentó a finales del año pasado, una acusación que calificó de "ilógica".
Además, también mostró su apoyo a la participación del sector privado en la industria petroquímica y en la del refinado de crudo, si bien reafirmó que por mandato legal la producción de crudo en Irán debe permanecer en manos del Estado.
Atraer inversores para su maltrecha industria del petróleo ha sido uno de los objetivos centrales del Gobierno iraní tras la eliminación de las sanciones internacionales sobre su economía, ocurrida a principios de este año pero para la que se llevaba preparando desde hace varios meses.
El pasado noviembre el CPI fue presentando al mundo en un evento de dos días en Teherán ante un ansioso y expectante auditorio compuesto por cerca de un millar de representantes de 152 compañías internacionales de petróleo procedentes de 45 países.
En dicha reunión, empresarios consultados por Efe consideraron las nuevas condiciones como "muy buenas" y "mucho mejores" que las que ofrecían los antiguos contratos iraníes.
Desde el fin de las sanciones ya han sido varias empresas internacionales las que han anunciado que volverán a comprar crudo iraní, si bien todavía no se ha firmado ningún acuerdo de inversión directa en el país bajo los CPI.