Investing.com – Los precios del petróleo siguen descendiendo durante la jornada de negociación de este lunes en Estados Unidos, al volver a centrarse la atención en la superabundancia de reservas y la demanda global.
En el ICE Futures Exchange de Londres, el petróleo Brent para entrega en abril se negoció a 31,85 USD por barril, con un retroceso del 3,01% o 99 centavos a las 13:45, hora de Londres (las 14:45 en España).
Los precios del Brent que se negocian en Londres subieron casi un 10% o 3 USD el viernes, pues las expectativas de que Europa y Japón implementen nuevas medidas de estímulo han hecho dispararse la cobertura corta.
Los futuros del Brent subieron un 11,2% o 3,45 USD la semana pasada, interrumpiendo la racha descendente de las últimas tres semanas. A pesar de esta reciente recuperación, las pérdidas desde principios de este año siguen siendo de casi un 15%.
El Brent se desplomó hasta negociarse en 27,10 USD oír barril el 20 de enero, su cota más baja desde octubre de 2003, pues la constante preocupación en torno a las previsiones económicas de China contribuía a los temores de que la superabundancia de reservas globales pueda durar mucho más de lo previsto.
Por otra parte, el petróleo del New York Mercantile Exchange para entrega en marzo se situó en 31,19 USD por barril con un retroceso del 3,12% o 1 USD. Los precios del Nymex se dispararon el viernes un 9,01% o 2,66 USD este viernes. Los analistas del mercado creen que esta recuperación no ha sido más que lo que se conoce como un dead cat bounce (literalmente “rebote del gato muerto”), un pequeño y breve repunte que se quedará en nada, provocado por unas condiciones de sobreventa.
Los futuros sobre petróleo que se negocian en Nueva York ganaron la semana pasada un 9,42% o 2,99 USD, su primer aumento semanal en un mes. Las pérdidas del petróleo estadounidense de referencia este mes siguen siendo de casi un 16% ante la creciente inquietud en torno a la superabundancia global de reservas.
Los futuros del petróleo de Estados Unidos se desplomaron por debajo de los 27 USD por barril la semana pasada por primera vez desde septiembre de 2003, ya que a los inversores les preocupaba que la enorme superabundancia de petróleo coincida con la brusca ralentización económica, especialmente de China.
China es el segundo consumidor de petróleo del mundo, sólo superada por Estados Unidos, y constituye un motor fundamental de la demanda de oro negro, actualmente en auge.
La producción global de petróleo está dejando atrás la demanda tras el boom de producción de petróleo de esquisto de Estados Unidos y después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo decidiera el año pasado no frenar los niveles de producción para defender las cuotas de mercado.
El tema de la superabundancia se complicará aún más cuando Irán se reincorpore al mercado internacional de petróleo el año que viene en cuanto se levanten las sanciones impuestas por Occidente. Los analistas creen que el país podría incrementar rápidamente su producción en aproximadamente 500.000 barriles.
El aumento del suministro de petróleo procedente de Irán va a ser perjudicial para el petróleo, que ha caído casi un 75% desde que se situara en 115 USD hace dos veranos, ante la superabundancia de reservas observada en los mercados de todo el mundo.
La mayoría de los analistas del mercado creen que la superabundancia global empeorará este año debido al aumento de la producción de Norteamérica, Arabia Saudí y Rusia.
Mientras, el diferencial entre los contratos de Brent y crudo del WTI se situó en 66 centavos por barril, frente a la brecha de 1 centavo registrada al cierre del viernes.