Roma, 13 ene (.).- La patronal italiana pidió hoy al Gobierno de Mario Draghi que rebaje aún más el recibo energético y evite que, sobre todo las pymes, interrumpan su producción o la trasladen a otros lugares con menor coste, mientras los partidos de la coalición apostaron por gravar los beneficios extra de las eléctricas.
El ministro de Desarrollo Económico y miembro de la ultraderechista Liga, Giancarlo Giorgetti, lanzó el miércoles la propuesta de que Italia siga el ejemplo de España y reduzca los beneficios que obtienen las centrales eléctricas que no emiten carbono por cobrar en el mercado marginalista el mismo precio que las que sí emiten.
Una mayor fiscalidad sobre estos beneficios generaría recursos que el Estado destinaría a bonos para familias vulnerables, explicó.
Este jueves se han sumado a esta iniciativa exponentes del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y del conservador Forza Italia, mientras que la mayor fuerza progresista del país, el Partido Demócrata (PD), se ha mostrado favorable a actuar, pero no abiertamente sobre cómo hacerlo.
Maurizio Marchesini, de la patronal italiana, Confindustria, subrayó que "el choque energético es un problema para todas las cadenas de suministro" y existe el riesgo de que las empresas "frenen su producción o la trasladen a otros lugares".
Por su parte, la asociación de consumidores Codacons indicó que "las elevadas facturas y la inflación pueden frenar la recuperación económica" y calculó que el coste energético para las empresas será de 37.000 millones en 2022, cuatro veces más que antes de la pandemia.
La cifra está en línea con la estimada por la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's, que apuntó a que será de entre 30.000 y 35.000 millones de euros.
El Gobierno italiano estudia cómo poner freno a esta situación, que afecta a varios países de Europa, y ya a principios de semana Draghi admitió que las empresas que "han obtenido grandes ganancias con este aumento del precio del gas" deberían compartirlas "con el resto de la sociedad", pero no entró en detalles sobre cómo hacerlo.
El Ejecutivo de Mario Draghi ha intervenido entre julio del 2021 hasta marzo de este año más de 8.000 millones de euros (sumando los distintos paquetes aprobados) para frenar las subidas y congelar temporalmente los cargos fijos del sistema en electricidad y gas, y dar subvenciones a las familias vulnerables. Un paquete se aprobó entre julio y septiembre de algo más de 1.200 millones, otro de 3.000 millones para septiembre y diciembre, y ahora 3.800 millones para enero y marzo
La senadora del conservador Forza Italia Anna Maria Bernini dijo que "se está trabajando para transformar los ingresos adicionales de las eléctricas en un alivio para las empresas con problemas", mientras que el M5S apostó por "aportaciones solidarias de los operadores que obtienen grandes beneficios" y hacer un "uso estructural de lo recaudado en las subastas de emisión de derechos de CO2" para rebajar los cargos fijos del sistema de la electricidad y del gas.
Por su parte, la vicesecretaria de Economía y miembro del PD, Alessandra Sartore, se mostró más cauta y reconoció que "aún no se han definido los detalles de cómo actuar", en declaraciones a la televisión pública RAI.