Madrid, 23 jun (.).- La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha defendido este jueves que el mecanismo que limita el precio del gas destinado a la generación eléctrica "demuestra que funciona", incluso en un "contexto extraordinariamente difícil".
Durante su intervención en el desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum también ha hablado de la reducción del IVA de la electricidad, del 10 al 5 %, que se aprobará este sábado, y ha recalcado que las rebajas fiscales "son respuestas de emergencia" pero que, sólo con ellas, "no se resuelve el problema".
Desde su punto de vista, hay que acelerar "cambios estructurales de gran calado" que pongan el foco "en las causas del problema", en vez únicamente en soluciones con cargo al erario público, en referencia a las críticas de la oposición.
A pesar de que no ha entrado a valorar las palabras de la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, que afirmó que se estaba trabajando en "concretar la manera técnica para hacer viable" un impuesto a las eléctricas, Ribera ha hecho hincapié en que "hay que ser cuidadoso con cómo se configuran los mecanismos normativos".
EL TOPE AL GAS FUNCIONA
Acerca del tope al gas, la ministra ha llamado a la calma y ha pedido "que todo el mundo se relaje un poco y dé un poco de margen antes de valorar" este sistema, que entró en funcionamiento hace una semana y que durará hasta el 31 de mayo de 2023.
En cualquier caso, Ribera ha hecho una "valoración positiva" de la medida, que echó a rodar "en condiciones excepcionales, muchísimo más complicadas de lo pensado", en mitad de una ola de calor "sin antecedentes equivalentes".
A pesar del "cúmulo de circunstancias" que tensionó la puesta en marcha del mecanismo, Ribera ha insistido en que, "día tras día" se han registrado diferencias "muy importantes" entre el precio del mercado mayorista de la electricidad o "pool" en Europa y el de la península ibérica.
"Demuestra que funciona y permite pensar en reformas que inviten a firmar contratos a largo plazo de la industria con desarrolladores, promotores y comercializadoras", ha recalcado.
Pero también "en una revisión de la tarifa regulada que cuente con unos referentes de precios distintos, como ya aparecen en todas las estimaciones de cómo pueden evolucionar los 'forwards' (futuros) en Europa y cómo lo harán en España".
SITUACIÓN "TERRIBLE" EN FRANCIA
Ribera se ha referido, asimismo, a las críticas que apuntan a que el diseño del mecanismo no ha tenido en cuenta el aumento exponencial de las exportaciones hacia Francia, como consecuencia de los bajos precios de casación en el mercado ibérico de la electricidad.
"Debemos ser congruentes. Si estamos diciendo que necesitamos más Europa y mejor aprovechamiento de las complementariedades, no podemos decir después que no queremos mercado interior ni interconexión", ha subrayado.
La ministra, que ha pedido "que todo el mundo se relaje un poco y dé un poco de margen antes de valorar" el límite al precio del gas destinado a la producción eléctrica, ha explicado que Francia "está viviendo una situación terrible".
En este sentido, ha detallado, Francia ha tenido que hacer frente a las condiciones meteorológicas y a una "tensión importantísima en sus sistema de producción de electricidad para refrigeración, porque contaba ya con una parte muy importante de su parque nuclear parado por razones de seguridad".
Así, "Francia está teniendo que importar electricidad desde donde se la exportan", ha aseverado Ribera, que ha celebrado que, "afortunadamente", Europa sea un continente que entiende que "si se puede, se debe ayudar".
No obstante, sí que ha reconocido que, en momentos como el de la semana pasada, con una baja producción eólica y fotovoltaica por la calima, "la producción extra para exportación sea satisfecha con gas", una tecnología que conlleva un mayor coste.
"Incluso con todo eso, el precio del megavatio hora (MWh) en España para un consumidor con tarifa vinculada al mercado mayorista, es decir, que tenga que incorporar el ajuste, ha sido entre 25 y 30 que en ausencia de mecanismo", ha sentenciado.
Igualmente optimista se ha mostrado Ribera cuando se le ha preguntado por la decisión de Alemania de contemplar el uso de carbón para reducir la cantidad de gas empleado para generar electricidad y en la industria, a fin de acelerar el llenado de los depósitos de reserva ante la restricción del suministro desde Rusia.
A diferencia de ello, España cuenta con recursos "para poder abastecer sus necesidades sin volver la vista atrás".
"Lo que me llama la atención es que no estemos todos contentos y aliviados pensando en la suerte que tenemos", ha zanjado.
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