Una demanda colectiva contra el exchange de criptomonedas Coinbase, Coinbase Global (NASDAQ:COIN) y su CEO, Brian Armstrong, por venta de valores no registrados fue desestimada el 1 de febrero en el Tribunal de Distrito del Sur de Nueva York. La demanda, presentada el 11 de marzo, alegaba que 79 de los tokens que cotizaban en Coinbase eran valores que se vendían sin el debido registro y no se advertía a los clientes de sus riesgos.
La demanda se basaba en la Ley de Valores de 1933 y la Ley de Intercambio de 1934 y utilizaba la prueba Howey, establecida por el Tribunal Supremo de EE.UU. en 1946, para identificar los tokens. Los demandantes defendieron cada ficha individualmente. En su decisión, el juez Paul Engelmayer declaró en relación con las reclamaciones Howey:
"Si este caso llegara a juicio sumario, esta contención emergería como campo de batalla central".El juez asumió que los tokens son efectivamente valores en su análisis y no consideró más las reclamaciones basadas en Howey. Afirmó que el acuerdo de usuario de Coinbase contradice la afirmación de los demandantes de que Coinbase era el "vendedor real" de los tokens. Además, Coinbase no solicitó ventas según una definición jurídica estricta. Por lo tanto, se desestimaron las demandas en virtud de la Ley de Valores.