BeInCrypto - Para el estratega principal del banco, Jared Gross, aún llevará tiempo que el mercado de criptomonedas reciba un apoyo institucional masivo.
En un podcast realizado con Bloomberg, Gross dice que la mayoría de las instituciones se sienten aliviadas de no realizar grandes inversiones en el mercado cripto este año.
El último ciclo alcista del mercado, que comenzó a fines de 2020 y se prolongó durante todo 2021, estuvo marcado por la adhesión de los principales actores. Uno de los pioneros fue PayPal (NASDAQ:PYPL), que anunció inversiones y soporte para varios criptoactivos.
Otra empresa que ganó prominencia fue MicroStrategy, que se convirtió en el mayor tenedor de Bitcoin (BTC) entre las empresas que cotizan en bolsa, seguida por Tesla (NASDAQ:TSLA) de Elon Musk.
Sin embargo, muchas empresas tradicionales se mostraron reacias a realizar grandes inversiones en esta clase de activos, prefiriendo abstenerse o realizar pequeñas aportaciones. La llegada del bear market en 2022 ha dañado aún más el flujo de inversiones institucionales, haciendo que el interés de dichos inversores sea “efectivamente inexistente” en la actualidad, según el analista de JP Morgan (NYSE:JPM).
Los problemas que rodean a la industria
Gross afirma que la alta volatilidad presente en el mercado de criptomonedas sigue siendo un impedimento importante para la entrada de inversiones institucionales.
Según él, las incertidumbres que rodean a estos activos acaban siendo algo muy “desafiante” para la mayoría de los grandes inversores, que “están respirando aliviados por no haber entrado en este mercado y probablemente no lo hagan pronto”.
Cabe mencionar que 2022 fue un mal año no solo para la industria cripto, sino para varios mercados de renta variable. Las razones de esto son el aumento de la inflación y las tasas de interés en las economías más grandes del mundo y eventos externos como la guerra en Ucrania.
Sin embargo, algunos eventos fueron los responsables de empañar la reputación de las criptomonedas, como la caída del ecosistema Terra (LUNA) en mayo y la caída de FTX en noviembre. Los dos eventos fueron responsables de la quiebra de varias empresas del sector y provocaron que los inversionistas tuvieran miles de millones de dólares en pérdidas o se les impidiera retirar sus criptomonedas.
Otro impedimento para una mayor adopción institucional es la incertidumbre regulatoria que tiene el mercado cripto. Muchas empresas del propio sector están siendo investigadas o sometidas a escrutinio por parte de organismos gubernamentales, lo que está poniendo a los inversores institucionales en desventaja.
JPMorgan en el mundo de las criptomonedas
Curiosamente, JPMorgan ha adoptado una postura controvertida hacia el mercado de las criptomonedas en los últimos años. A pesar de que su CEO, Jamie Dimon, es un crítico acérrimo de Bitcoin, la institución fue el primer banco importante en ofrecer el trading de criptomonedas a sus clientes.
El gigante de Wall Street aún tiene otras iniciativas dirigidas al sector, habiendo creado una oficina en el metaverso Decentraland (MANA) y realizando pruebas en una blockchain privada. En noviembre, la institución utilizó la red Polygon (MATIC) para completar su primera negociación descentralizada.
A pesar de esto, será difícil ver a JPMorgan hacer grandes inversiones en criptomonedas, especialmente después de que su CEO advierta que podría avecinarse una gran recesión económica.
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