El precio de Bitcoin (BTC) superó los USD 25,000 el 21 de febrero, acumulando una ganancia del 53% en lo que va de año, por lo que era lógico esperar que el repunte continuara luego de que los datos de ventas minoristas de EE.UU. de la semana pasada superaran ampliamente el consenso del mercado. Esto alimentó la esperanza de los inversores de un aterrizaje sin problemas y la posible aversión a una recesión de la economía estadounidense.
La cúspide del éxito de la estrategia de la Reserva Federal estadounidense sería aumentar los tipos de interés y reducir su balance de USD 9 billones sin dañar significativamente la economía mundial en el proceso. Si se produce ese milagro, el resultado beneficiaría a los activos de riesgo, incluidas las acciones, las materias primas y Bitcoin.
Lamentablemente, los mercados de criptomoneda sufrieron un duro golpe tras el rechazo del nivel de los USD 25,200 y la caída del precio de Bitcoin en un 10% entre el 21 y el 24 de febrero. La presión regulatoria, principalmente de EE.UU., explica en parte la razón de los inversores para el empeoramiento de las condiciones del mercado.