El Departamento de Trabajo de los Estados Unidos informó que el volumen de empleo en el país parece tener una buena tendencia pese a la crisis internacional y la reiterada política monetaria contractiva de la Fed.
Aunque el mercado de trabajo no pasa por sus mejores días, lo cierto es que ha presentado bastante resiliencia en el último trimestre. Según informó el New York Times; los datos indican que los empleadores tenían 10,7 millones de puestos abiertos al final del verano, frente a los 10,3 millones de agosto.
Esta cifra deja aproximadamente 1,9 puestos de trabajo publicados por cada trabajador desempleado, una proporción persistentemente alta incluso cuando la economía parece estar desacelerándose porque debido a la “batalla” de la Reserva Federal contra la inflación.
Cuando una economía muestra signos de debilidad; el síntoma más común es una reducción en las ofertas de trabajo, o al menos un mayor retraso en el tiempo de contratación, para evitar futuros despidos.
En la práctica, la economía de Estados Unidos parece ser la excepción por excelencia. El mercado laboral ha tardado en responder al aumento de las tasas de interés, incluso cuando otros indicadores apuntan a una recesión inminente.
La mayoría de los analistas esperan que el guión de la Fed se repita y que esta eleve su tasa de interés de referencia en un 0,75 por ciento. La alta probabilidad de que se repita este suceso, parece ser la razón de la resiliencia del mercado laboral estadounidense. En otras palabras; tanto empresarios como trabajadores ya saben de antemano lo que hará la Fed, por lo que lo han asimilado en sus expectativas.
La dificultad está en la contratación
El número de puestos vacantes es consistente con las encuestas de empresas. Paradójicamente, existen más dificultades para contratar que para obtener un empleo. La Federación Nacional de Empresas Independientes encontró en su encuesta de septiembre que el 23 por ciento de sus miembros planeaba crear nuevos puestos de trabajo en los próximos tres meses, y de ellos, el 89 por ciento dijo que tenía pocos solicitantes calificados.
El salto en las ofertas de trabajo se habría debido en gran parte a los grandes aumentos en hoteles y restaurantes, que agregaron 215,000 publicaciones. Y el sector de la salud y la asistencia social buscaba 115,000 trabajadores más que el mes anterior; alcanzando un total de 2,1 millones de vacantes, el nivel más alto registrado.
Al mismo tiempo, el número de personas contratadas se redujo a alrededor de 6,1 millones; continuando con la tendencia a la baja que comenzó esta primavera. Eso podría ser una consecuencia de que los empleadores tengan más dificultades para encontrar candidatos calificados o decidan mantener los puestos vacantes por más tiempo mientras esperan que se asiente el polvo económico.
Aún existe el bloqueo de la inflación
La inflación ha obligado a algunos trabajadores a buscar formas de aumentar sus ingresos, ya sea pidiendo aumentos o buscando otros trabajos. Al mismo tiempo, el temor a una recesión inminente ha llevado a algunos trabajadores a quedarse a menos que tengan otra oferta a la mano.
Los abandonos cayeron más en las industrias que enfrentan los vientos en contra más fuertes de las tasas de interés más altas y el debilitamiento del gasto del consumidor; incluida la construcción, el transporte y el almacenamiento, y la manufactura.
El número de despidos también disminuyó con respecto a los últimos meses. Eso está en línea con los informes semanales de solicitudes iniciales de seguro de desempleo, que se han mantenido cerca de mínimos históricos. Después de contratar agresivamente durante el último año, y a menudo con salarios más altos, los empleadores pueden estar menos dispuestos a dejar ir a las personas, incluso cuando el negocio vacila.
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