El mes de febrero ha traído mucho ruido alrededor del sector de las criptomonedas y los organismos regulatorios en los Estados Unidos.
Luego de la multa que impuso la Comisión de Valores de la nación norteamericana (SEC) a Kraken por treinta millones de dólares y su instrucción directa de suspender su programa de Staking, la batería se enfiló de forma casi paralela contra Paxos y la stablecoin BUSD, emitida en la cadena de bloques de Binance, BNB Chain.
Como resultado, las reacciones no se han hecho esperar entre los diferentes actores de la comunidad de criptomonedas y algunos que si bien no hacen vida en ella, observan muy de cerca las acciones del organismo regulador sobre el ecosistema cripto en los últimos días.