Por Jamie McGeever
LONDRES (Reuters) - La retirada de depósitos de los bancos griegos ascendió la semana pasada a cerca de 3.000 millones de euros, según la estimación de JP Morgan, antes del acuerdo de extensión de la ayuda acordado el viernes con los acreedores de la eurozona.
El aumento del 50 por ciento en el ritmo de las retiradas frente a los 2.000 millones de la semana pasada conlleva que los bancos griegos van camino de quedarse sin garantías para nuevos préstamos en ocho semanas, en lugar de las 14 semanas que se esperaban la semana pasada, dijo JP Morgan.
Este dato se basa en el cálculo de que de un máximo de 108.000 millones de euros de financiación disponible del Banco Central Europeo y el Banco Central griego, los bancos helenos ya han utilizado hasta 85.000 millones, dejándoles con 23.000 millones si fuera necesario.
Los duros datos de los depósitos bancarios helenos llegan con un gran retraso, lo que significa que las estimaciones son las referencias más actualizadas.
La retirada se aceleró, aparentemente, durante la semana pasada. Alcanzó más de 1.000 millones de euros durante miércoles y jueves, según informaron tres fuentes bancarias a Reuters el viernes, y en torno a 1.000 millones sólo el viernes, según otra fuente.
Grecia está negociando con los socios internacionales una lista de reformas entre las que se encuentran medidas para evitar la evasión fiscal y la corrupción. Su aprobación aseguraría la línea de apoyo acordada el viernes.
El total de la retirada de depósitos bancarios de este año, que JP Morgan estima utilizando un equivalente de la demanda griega de fondos del mercado de dinero en el extranjero, es de 25.000 millones de euros, lo que equivale a 3.000 millones semanales.
La salida de depósitos aumentó en la carrera hacia las elecciones del 25 de enero, que dieron al Gobierno actual la victoria, cayendo a partir de entonces antes de volver a aumentar según se acercaba la fecha final para llegar a un acuerdo sobre la deuda.