Buenos Aires, 28 may (EFE).- Un grupo de militantes de una agrupación política liberal de Argentina salió hoy a vender dólares a viva voz en las calles del centro de Buenos Aires, en protesta contra los controles del Fisco argentino a la compra de divisas extranjeras.
La curiosa protesta fue protagonizada por integrantes del Partido Liberal Libertario, una fuerza política en formación, cuyos miembros se congregaron hoy en pleno distrito financiero de Buenos Aires para ofertar dólares en la calle, en abierto desafío a las normas que sólo permiten la compraventa de divisas extranjeras en bancos y casas de cambio.
La protesta se realizó en momentos en que el Fisco ha incrementado los requisitos para poder comprar dólares, impuestos desde noviembre pasado, y ha reforzado los controles para evitar las operaciones de compraventa informales de divisas.
"Estamos sufriendo un 'corralito verde', un ataque directo a nuestra libertad de hacer uso del fruto de nuestro trabajo. El Gobierno es el principal causante de la inflación al imprimir moneda sin respaldo del Banco Central y no nos deja siquiera protegernos de esa inflación a través del ahorro en dólares", dijo a Efe el presidente del Partido Liberal Libertario, Gonzalo Blousson.
Desde el reforzamiento de los requisitos y los controles, la brecha entre el precio del dólar en el mercado formal y su valor en el mercado paralelo se ha disparado hasta cerca de un 30 por ciento.
El dólar se cotiza a 4,49 pesos por unidad en bancos y casas de cambio, pero se vende a más de 6 pesos en el mercado informal, según medios de prensa locales.
En la protesta organizada hoy por el Partido Liberal Libertario, la moneda estadounidense se comercializó a entre 5 y 6 pesos por unidad.
La venta ilegal de divisas está penada por las leyes argentinas, pero Blousson aseguró que la acción realizada por su parido hoy fue una "venta simbólica, de uno o dos dólares por persona, como una manera de decirle 'basta' al Gobierno y que los ciudadanos tienen el derecho constitucional de hacer uso de su propiedad y de comerciar".
"No fuimos a lucrar con la venta de dólares, sino a protestar, como parte de nuestro ejercicio de la libertad de expresión. Es una manera de resistirnos ante estas regulaciones inmorales", sostuvo Blousson. EFE