Shanghái (China), 8 ene (EFE).- Las ventas de automóviles de marcas japonesas en China han seguido remontando en diciembre, aunque sin recuperar todavía su volumen anterior a septiembre, cuando las tensiones bilaterales por unas islas que ambos países se disputan provocó hostilidad hacia lo japonés en el mercado chino.
La situación es similar para las tres principales marcas niponas: Nissan, Honda y Toyota, que acaban de publicar sus cifras de ventas en diciembre.
De las tres, Nissan es ahora mismo la más afectada, con una caída de sus ventas de un 24 por ciento respecto de sus cifras de diciembre de 2011, hasta las 90.400 unidades puestas en el mercado chino durante el mes pasado.
Con todo, la compañía mejoró sus cifras respecto de las de noviembre pasado, cuando la caída de sus ventas en China fue de un 29,8 por ciento interanual, y de las de octubre, cuando llegaron a ser de un 41 por ciento.
Por su parte, las ventas de Honda cayeron en diciembre un 19,2 por ciento interanual, hasta 63.264 unidades, lo que también supone una mejora respecto de la caída de un 29,2 por ciento interanual que registraban en noviembre.
Entretanto, las ventas de Toyota se redujeron un 15,9 por ciento interanual en diciembre, por debajo de la reducción de un 25 por ciento que tuvieron en noviembre, hasta las 90.800 unidades.
Las firmas niponas están empezando a remontar gracias a importantes descuentos e incentivos a la compra para combatir el sentimiento antijaponés, aunque de todas formas las tres registraron pérdidas en sus cifras anuales.
Así, durante 2012, las ventas anuales de Nissan en China cayeron un 5,3 por ciento, hasta 1,18 millones de unidades, las de Honda cayeron un 3,1 por ciento, hasta 598.577 unidades, y las de Toyota se hundieron otro 4,9 por ciento, hasta las 840.000 unidades, lo que movió a la firma a reducir su objetivo para 2013 hasta las 900.000.
Según la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China, debido a este sentimiento antijaponés entre los consumidores chinos, la cuota de ese mercado que ocupan las marcas niponas equivalía en diciembre pasado a cerca de un 17 por ciento del total, por debajo del 19 por ciento que acaparaban hasta finales de agosto.
Japón anunció en septiembre la compra de tres de las islas Diaoyu (Senkaku en japonés), lo que fue visto en China como una provocación y una violación de su soberanía, y dio lugar a violentas protestas antijaponesas en distintas ciudades, que obligaron a detener temporalmente la actividad de numerosas multinacionales niponas.
Las empresas mixtas y las firmas chinas relacionadas con el país vecino también se vieron afectadas por las protestas y el boicot de los consumidores a las marcas japonesas, con sus consiguientes pérdidas tanto económicas como en el mercado de valores.
Se cree que el conjunto de estas islas, deshabitado y con una superficie de poco más de 7 kilómetros cuadrados, cuenta con importantes yacimientos de gas y petróleo y una abundante reserva pesquera, que actualmente está administrada de facto por Japón, aunque China reclama su soberanía. EFE