Lima, 17 feb (EFE).- El Gobierno peruano dio los primeros pasos
para reordenar la minería aurífera, que se realiza principalmente de
manera artesanal e informal en la región selvática de Madre de Dios,
la de mayor biodiversidad del país, anuncio hoy el ministro peruano
del Ambiente, Antonio Brack.
En declaraciones a periodistas al culminar una reunión del
Consejo de Ministros, en el Palacio de Gobierno en Lima, Brack dijo
que el presidente Alan García firmará hoy un decreto de urgencia
para el ordenamiento de la minería aurífera en Madre de Dios, donde
se encuentran los parques nacionales del Manú y del Bahuaja Sonene,
entre otras reservas naturales.
Como parte de las medidas, el Gobierno continuará con la
suspensión del otorgamiento de derechos mineros por un tiempo
indefinido, la prohibición de las operaciones de dragas (proceso de
eliminación de suelo o de materiales del fondo de ríos, lagos o
puertos de mar) en los ríos de Madre de Dios.
También se establecerá una zona de exclusión minera y sólo "se va
a permitir la minería aurífera aluvial en el 9 por ciento del
territorio de Madre de Dios, en el resto va a estar prohibido para
no interferir con áreas protegidas, tierras indígenas y otras",
agregó Brack.
También se buscará formalizar la minería artesanal y la pequeña
minería en zonas donde están permitidas en Madre de Dios, agregó el
titular del Ambiente.
"Estamos consiguiendo financiamiento internacional y también los
ministerios de Trabajo y otros van a colaborar en el fortalecimiento
de esta actividad en Madre de Dios y controlar la violación de la
ley, porque de los cerca de 3.000 derechos mineros que hay en este
departamento, solamente 24 tienen licencia ambiental, los demás
están violando la ley", dijo Brack.
La minería informal en Perú produce un estimado de 20 toneladas
anuales de oro en distintos puntos del país y emplea a un mínimo de
40.000 personas, aunque esta cifra puede llegar a 100.000, según
datos oficiales.
El principal foco de minería informal de oro se encuentra en la
región selvática de Madre de Dios, fronteriza con Bolivia y Brasil,
y en ella se calcula que hay por lo menos unos 16.000 trabajadores
informales.
Se calcula que los mineros informales producen 16 toneladas de
oro al año, que venden por 1.200 millones de dólares, y contaminan
el medio ambiente con 32 toneladas de mercurio que arrojan en Madre
de Dios.
Defensores del medio ambiente como el ex vicepresidente de la
Comisión Mundial de Áreas Protegidas Marc Dourojeanni han advertido
que la Amazonía peruana puede quedar casi devastada en el año 2041
si no se toman las medidas de protección adecuadas. EFE