Sao Paulo, 23 sep (EFE).- La Bolsa de Valores de Sao Paulo, tras un día de fuertes pérdidas y pese a las promesas del G20 de dar una respuesta coordinada a la crisis, inició la jornada de hoy con tendencia a la baja y, tras 10 minutos de subastas, su índice Ibovespa cedía un 0,26 por ciento, hasta 53.143 puntos.
La plaza paulista, así como la mayoría de los mercados asiáticos y europeos, mantuvo el pesimismo de la víspera e ignoró la promesa de los ministros del G20, el foro que reúne a los países más desarrollados y a los principales emergentes, de dar una respuesta "fuerte y coordinada" a los problemas actuales, principalmente a la crisis financiera europea.
El Ibovespa, principal indicador del mercado bursátil brasileño, operaba a los cinco minutos de subastas 137 puntos por debajo de los 53.280 enteros con que cerró el jueves, cuando se desplomó un 4,83 por ciento por las turbulencias internacionales ante los temores a una recesión mundial que hundieron todas las bolsas.
En el mercado de cambios, el real abrió con una depreciación del 0,63 por ciento frente al dólar, que era vendido a 1,907 reales.
Las acciones del índice Ibovespa que más bajaban hoy tras 15 minutos de subastas eran las ordinarias de la eléctrica CPFL, que caían 1,91 por ciento, seguidas por las ordinarias del administrador de tarjetas de crédito y de débito Cielo (-1,57 por ciento) y por las preferenciales de Gerdau Metalurgia (-1,48 por ciento).
El volumen financiero contratado hasta los 15 minutos de negocios era de 250,6 millones de reales (unos 131,9 millones de dólares) en 26.621 negocios. EFE