México, 24 mar (EFE).- La Suprema Corte de México aceptó hoy
revisar el amparo interpuesto por el Sindicato Mexicano de
Electricistas (SME) contra el decreto de extinción de la empresa Luz
y Fuerza del Centro (LyFC) por el que fueron despedidos 44.500
trabajadores en octubre de 2009.
Los magistrados de la Segunda Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación (SCJN) determinaron "reasumir" su competencia
y revisar el recurso de inconstitucionalidad interpuesto en enero
pasado por los electricistas.
Este recurso fue rechazado en noviembre pasado por la juez de
distrito Guillermina Coutiño, con el que les niega a los
electricistas un amparo.
El Supremo considera que dicha resolución no es válida, toda vez
que los tribunales colegiados no tienen la facultad de analizar un
caso de inconstitucionalidad y que este tema solo corresponde al
alto tribunal.
"Al reasumir la SCJN la competencia originaria, permite que se
resuelvan de forma integral todos los planteamientos que comprende
el asunto, inclusive los de legalidad y de procedencia del juicio de
amparo", señala el comunicado.
En enero pasado, la defensa legal del SME solicitó a la Corte
Suprema ejercer su facultad de atracción para resolver de forma
definitiva el amparo promovido.
De igual forma, la Procuraduría General de la República (PGR,
Fiscalía) solicitó al alto tribunal atraer el caso con el fin de
determinar si el decreto de la desaparición de Luz y Fuerza se
realizó conforme a derecho constitucional.
No obstante, los magistrados aclararon hoy que el caso se atrajo
por competencia y no por la solicitud de la PGR.
"La segunda sala no ejerce la facultad de atracción que solicitó
el procurador general de la República", aclara el documento, en el
que añade que "la naturaleza misma del amparo es suficiente para que
conozca del asunto".
Los ex trabajadores consideran que el decreto de extinción de la
empresa Luz y Fuerza forma parte de una estrategia de intereses
políticos y económicos bajo el argumento de ineficacia operativa y
administrativa, pero, sobre todo, aseguran que viola sus derechos
laborales.
El pasado 11 de octubre el Gobierno federal decretó la extinción
de la empresa LyFC y despidió a los 44.500 electricistas afiliados
al SME, que atendía a unos 26 millones de personas en el centro del
país.
Desde esa fecha el Gobierno mexicano inició la liquidación de los
ex trabajadores electricistas, pero alrededor de 15.000 mantienen su
resistencia mediante movilizaciones y acciones legales contra la
desaparición de la empresa. EFE