Santiago de Chile, 20 jun (EFE).- Las acciones de la cadena minorista chilena "La Polar", envuelta en un escándalo por renegociar unilateralmente las deudas de sus clientes, se desplomaban hoy en la Bolsa de Santiago, al reanudarse su transacción después de cinco días suspendidas.
Los papeles de la firma, cuyos ejecutivos engañaron a más de 400.000 clientes, según las primeras investigaciones del caso, se cotizaban poco después de la apertura en 365 pesos (0,77 dólares), un 74,48 por ciento menos que los 1.430 pesos (3,04 dólares) que valían el pasado día 13, cuando fueron suspendidas por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).
Ese valor ya suponía un desplome del 42,12 por ciento respecto del precio que había antes del estallido del escándalo, que había significado a la cuarta cadena minorista más importante de Chile, tras Falabella, Ripley y Almacenes París, una pérdida de valor bursátil calculada en 670 millones de dólares.
Mientras a la investigación judicial del caso se suma hoy una indagación política a cargo de una comisión de la Cámara de Diputados, el presidente del directorio de la empresa, Heriberto Urzúa, anunció su dimisión, sólo diez días después de haber asumido el cargo, tras estallar el escándalo.
Urzúa dijo en un comunicado que en este lapso "se ha cumplido una etapa importante y el paso que sigue para la empresa es que se genere un nuevo entorno financiero y de confianza".
Para el dimisionario, la nueva etapa debería comenzar el miércoles, cuando se celebrará una junta extraordinaria de accionistas, que deberá votar un aumento de capital por al menos 400 millones de dólares.
Según cálculos de los expertos, La Polar deberá aumentar sus provisiones (coberturas por eventuales pérdidas) en al menos 819 millones de dólares para hacer frente a la crisis.
La junta de accionistas del miércoles "se efectuará en medio de una profunda crisis de la compañía, que ha revelado prácticas contrarias a sus propias políticas. Lo anterior es consecuencia de un fraude, que aparece lesionando la confianza, tanto de nuestros clientes, como la de sus accionistas y la del país", dijo en su comunicado Heriberto Urzúa.
"Acepté asumir como presidente transitorio de La Polar por un breve periodo, con el único propósito de buscar la verdad, esclarecer los hechos y sentar las bases que permitieran generar condiciones para enfrentar el futuro de la compañía", agregó.
Este martes, por otra parte, comenzará en los locales de la cadena la atención a los clientes afectados, a los cuales se les ofrecieron alternativas de solución.
Durante el fin de semana, la policía allanó los domicilios de al menos siete gerentes y exdirectores de la empresa, y se incautó de discos duros, ordenadores, teléfonos celulares y documentos, con el fin de obtener mayor información sobre el escándalo.
Un 24 por ciento de la propiedad de la cadena está en manos de Fondos de Pensiones, pero las autoridades y las propias administradoras de esos fondos han asegurado que el daño, de concretarse, no será relevante. EFE