Madrid, 9 oct (.).- El gasto en prestaciones por desempleo, tanto contributivas como asistenciales, se ha reducido unos 13.600 millones de euros desde el año 2010, debido al descenso del número de beneficiarios y del importe medio que han experimentado durante la crisis, según un informe de coyuntura laboral de CCOO.
Según sus datos, entre enero y agosto el gasto en prestaciones para desempleados acumuló un descenso de 1.400 millones de euros y, de mantenerse esta tendencia el resto del año, alcanzará los 2.000 millones.
Esta cifra se suma a la registrada en años anteriores, ya que el gasto anual en prestaciones se situó en 32.238 millones en 2010 y se redujo hasta 20.610 millones en 2015, es decir, un total de 11.628 millones menos.
"Este recorte tiene su origen en un sistema de protección que no estaba preparado para una crisis tan profunda y con una duración tan larga", dice CCOO en el informe.
No obstante, añade que también han hecho mella "los recortes impuestos por el Gobierno y que no se han visto paliados con la fallida creación del Programa de activación para el empleo".
Los últimos datos facilitados por el Ministerio de Empleo sobre prestaciones, muestran que en el pasado mes de agosto había 2.036.881 beneficiarios de estas prestaciones.
De ellos, 848.265 cobraban la prestación contributiva, 824.528 el subsidio por desempleo; 219.619, la renta activa de inserción; 120.521, el subsidio para eventuales agrarios; y 23.948, la ayuda del Programa de activación para el empleo (para parados de larga duración con cargas familiares que entró en funcionamiento a comienzos de 2015).
La tasa de cobertura de dicha prestación alcanzó al 58,2 % de los parados, lo que supone que casi 4 de cada 10 desempleados no cobraba ningún tipo de ayuda.
Esta tasa contrasta con la marcada en 2010, cuando alcanzó un nivel medio anual del 78,4 %, marcando máximos mensuales que llegaron al 80 %.
La amplia duración de la crisis y su intensidad -en términos de destrucción de empleo- ha provocado el enquistamiento del paro de larga duración que afecta a la mayoría de la población parada, que se encuentra cada vez con una menor protección.
Esta menor protección, añade CCOO, se refleja en el descenso de su calidad media (con menor proporción de parados que perciben la prestación contributiva frente a aquellos que perciben una asistencia) y de la cuantía media (en agosto la prestación contributiva alcanzó los 799,3 euros mensuales de media).
Desde el año 2010 el descenso de las prestaciones contributivas por desempleo ha sido mucho más intenso que el de las asistenciales, dice CCOO, si bien en los últimos meses de 2016 se percibe un freno en este deterioro.