Mantega reconocía ante los periodistas: “Probablemente hubo recesión técnica en el primer trimestre, aunque el dato oficial solo lo confirmará el 9 de junio”.
Muy probablemente, el anticipo de mantega se concrete, es por ello que su anuncio anticipado busca tener un efecto sobre las expectativas de modo tal de que la noticia no resulte sorpresiva e inunde de un pesimismo exagerado el contexto económico local.
Este trabajo sobre las expectativas está reforzado por la confianza del propio Mantega de que la economía de Brasil observará un resultado positivo hacia el presente trimestre.
Las perspectivas sobre la economía brasileña realizadas por el FMI anticipan una contracción del 1,3% durante el presente año.
El dato positivo lo arroja el mercado laboral que generó más de 100.000 puestos de trabajo formales durante el mes de abril.