Madrid, 7 sep (.).- El PSOE quiere que el Gobierno tome de una vez medidas contra la 'reduflación' o práctica de algunos fabricantes, sobre todo de alimentos, de reducir la cantidad o el tamaño de un producto cobrándolo al mismo precio o incluso más caro, como ya han hecho Francia y Alemania.
Aunque esta práctica, que se viene realizando desde hace décadas, es legal, los socialistas consideran que constituye una "maniobra fraudulenta", si no se comunica al consumidor de manera correcta y explícita.
En España, la organización de consumidores OCU llegó a denunciarla ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y ha llevado a cabo una campaña de información y denuncia porque entiende que conlleva subidas de precios encubiertas.
Debate en el Congreso
El debate sobre la 'reduflación' llegará la próxima semana al pleno del Congreso, donde el grupo socialista planteará que el Gobierno debe "obligar a las empresas a informar a las personas consumidoras de forma clara sobre cualquier disminución en el tamaño o peso de un producto cuando se mantenga un precio equivalente o superior".
La proposición no de ley que defenderá el PSOE insta también al Ejecutivo a "reforzar, dentro de las campañas de vigilancia del mercado, el control sobre la presentación de los productos que pueda inducir a error sobre la cantidad que contienen sus envases", según consta en el texto.
Además, los socialistas creen que el ministerio con las competencias de consumo que dirige su socio de Sumar Pablo Bustinduy debería "realizar, con la colaboración de las asociaciones nacionales de consumidores, campañas de información con objeto de que las personas consumidoras puedan reconocer las prácticas de 'reduflación' y cómo pueden protegerse de ellas".
Medidas en Francia y Alemania
En Francia, en respuesta a la presión de las asociaciones de consumidores, está en vigor desde el pasado julio un decreto que obliga a los supermercados grandes y medianos a instalar carteles para informar de los productos cuyas cantidades se han reducido recientemente.
Por su parte, en Alemania se ha modificado la ley de envasado para prohibir los "envases engañosos" y garantizar que la información que figura en ellos sea clara y precisa.
Según un estudio publicado por la consultora IPSOS en noviembre de 2023, el 54 % de las personas consumidoras en España han notado una reducción del tamaño de los productos en su compra cotidiana, principalmente en aperitivos, pan, pasta, arroz, dulces y comida precocinada.
Los socialistas destacan que en este estudio, realizado en un total de 33 países, seis de cada diez consumidores españoles ven esta práctica cómo inaceptable, lo que sitúa a España, con el 61 %, entre los países europeos más críticos después de Francia (67 %), Suecia (63 %) y Países Bajos, también con el 61 %.