Dos de las principales firmas de gestión de inversiones del Reino Unido, Legal & General (LON:LGEN) y Schroders (LON:SDR), han anunciado planes para invertir cientos de millones de dólares en el mercado inmobiliario comercial de Estados Unidos. Esta estrategia surge mientras estas compañías anticipan una recuperación en los precios de las propiedades, impulsada por una posible tendencia a la baja en las tasas de interés.
Legal & General, una de las firmas involucradas, considera el mercado inmobiliario estadounidense como una oportunidad significativa de expansión. António Simões, CEO de Legal & General, ha expresado confianza en los sólidos fundamentos del mercado estadounidense.
La compañía se prepara para aumentar sustancialmente su cartera de capital inmobiliario en EE. UU. durante los próximos años. Además, planean potenciar su negocio establecido de deuda inmobiliaria en una medida similar.
Para impulsar la iniciativa de inversión de capital, la firma ha formado un equipo de aproximadamente 20 personas en Chicago, centrándose principalmente en viviendas de alquiler en todo el país debido a su resistencia en comparación con el sector de oficinas.
Por su parte, Schroders también busca ampliar su cartera de capital inmobiliario en EE. UU. de decenas de millones de dólares a cientos de millones a medio plazo. La firma ha invertido recientemente en una cartera panamericana de centros de datos, marcando uno de sus pasos iniciales en el sector.
Además, Schroders ve potencial en la deuda inmobiliaria, ya que los bancos se retiran ante regulaciones de capital más estrictas. Jeffrey Williams, un inversor basado en Nueva York con Schroders, señaló la importante brecha de financiación que necesita ser cubierta por otros prestamistas.
Aunque las compañías son cautelosas con respecto al sector de oficinas, que se ha visto particularmente afectado por los mayores costos de endeudamiento y el cambio al trabajo remoto, no descartan por completo las inversiones en este ámbito. Sin embargo, tales inversiones tendrían que ser en desarrollos de alta calidad.
Phoenix, una aseguradora británica con un brazo de fondos que gestiona alrededor de 290.000 millones de libras esterlinas, también ha expresado su intención de invertir considerablemente en bienes raíces estadounidenses, aunque no se han revelado detalles específicos sobre la escala de la inversión.
El cambio estratégico de estos gestores de inversiones se produce en un momento en que el mercado inmobiliario estadounidense está experimentando una recalibración, con prestamistas y desarrolladores ajustando los precios de los activos más rápidamente que en Europa continental. Esta agilidad podría presentar oportunidades oportunas para que inversores como Legal & General y Schroders capitalicen.
Reuters contribuyó a este artículo.
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