Río de Janeiro, 14 abr (EFE).- El 84,5 por ciento de los 37.100 millones de dólares que las empresas chinas han invertido en proyectos productivos en Brasil en los últimos ocho años está concentrado en los sectores de metalurgia y minería, según un estudio divulgado hoy por el Gobierno.
Del total de la inversión directa de China en Brasil entre enero de 2003 y enero de 2011, un 56,5 por ciento ha sido dirigida a los metales (extracción y procesamiento) y un 28 por ciento al petróleo, el gas natural y el carbón, según el informe del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio.
Esa concentración de la inversión china en sectores de minerales y petróleo evidencia la estrategia del gigante asiático de garantizar su propio abastecimiento de materias primas, según el coordinador de la Red Nacional de Informaciones sobre Inversión del Ministerio, Eduardo Celino.
China se ha convertido en el mayor socio comercial de Brasil gracias a sus elevadas importaciones de materias primas, principalmente de hierro y petróleo, pero también de algunas agrícolas como soja.
La divulgación del informe coincidió con la visita oficial a China realizada esta semana por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, que defendió ante las autoridades de ese país la apertura del mercado asiático a productos brasileños de mayor valor agregado.
De los 37.100 millones de dólares que las empresas chinas han destinado a la adquisición o a la inversión en un total de 86 proyectos productivos en Brasil en el período analizado, sólo un 5,2 por ciento ha sido dirigido a la energía eléctrica, un 4 por ciento al sector automotor y un 1,9 por ciento a la logística de transportes.
Tan solo en 2010, las empresas chinas hicieron inversiones directas en Brasil por 17.170 millones de dólares, de los cuales 14.340 millones de dólares fueron directamente en petróleo y gas natural y minerales.
El sector petrolero, con 10.170 millones de dólares, fue el que más concentró la inversión china en Brasil el año pasado.
Los 2.830 millones de dólares restantes fueron destinados a los sectores de productos manufacturados, como automóviles y máquinas y equipos. EFE