São Paulo, 10 may (.).- La inflación en Brasil, la mayor potencia económica de América Latina, desaceleró de nuevo en abril y se ubicó en el 3,69 % interanual, frente al 3,93 % que marcó en marzo, informó este viernes el Gobierno.
En abril, el índice de precios al consumidor repuntó hasta el 0,38 %, 0,22 puntos más que la tasa de marzo, impactado por los sectores sanitario (1,16 %) y alimenticio (0,70 %), según los datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística.
La oficina de estadísticas del Gobierno explicó que hubo un reajuste en los precios de los medicamentos, mientras que los alimentos se vieron impactados por "fenómenos climáticos" que tuvieron lugar entre finales de 2023 y comienzos de 2024, y afectaron a la producción.
El mes pasado también subió la ropa y el transporte, con alzas del 0,55 % y el 0,14 %, respectivamente.
No obstante, la inflación de abril de este año es inferior a la registrada en el mismo mes de 2023, cuando llegó a 0,61 %.
El dato interanual (3,69 %) se encuentra además dentro del techo de la meta de inflación para este año, que es del 4,5 %.
De esta forma, los precios siguen por la senda de la desaceleración en Brasil, lo que ha llevado al Banco Central a recortar de forma paulatina los tipos oficiales de interés, actualmente en el 10,50 % anual.
El órgano emisor brasileño empezó a reducir gradualmente la tasa a mediados del año pasado, cuando estaba en el 13,75 %, en un intento por estimular la economía del país.
El miércoles pasado bajó los tipos 0,25 puntos, moderando su política de expansión monetaria, pues hasta ahora los recortes habían sido de 0,50 puntos.
El Producto Interior Bruto (PIB) brasileño creció en 2023 un 2,9 %, pero en este 2024 experimentará un frenazo que limitará el crecimiento al 2,0 %, según las últimas proyecciones de analistas del mercado financiero.