La zona euro se quedará en punto muerto en 2013 y se recuperará en 2014

Bruselas, 7 nov (EFE).- La economía de la eurozona se quedará prácticamente en punto muerto durante 2013 y habrá que esperar hasta 2014 para ver una recuperación, pronosticó hoy la Comisión Europea (CE), que presentó unas perspectivas económicas sombrías e inferiores a las estimadas por los gobiernos europeos.

"Previsiones para 2012-2014: navegando en aguas turbulentas" se titula el documento que hoy dio a conocer el vicepresidente de la CE y responsable de Economía, Olli Rehn, en el que revisa a la baja sus pronósticos de hace seis meses y dibuja un difícil panorama que "todavía durará algún tiempo".

Las modestas estimaciones de Bruselas cayeron como un jarro de agua fría sobre las bolsas europeas, que tras conocerlas perdían los avances registrados tras la victoria del presidente Barack Obama en las elecciones de Estados Unidos.

Para 2012, los economistas de la CE pronosticaron una contracción del producto interior bruto (PIB) para la zona euro del 0,4 % y un tímido avance del 0,1 % para 2013, frente a sus estimaciones de mayo que apuntaban a que los países de la moneda única registrarían una caída del 0,3 % este año y un crecimiento positivo del 1 % para el siguiente.

Habrá que esperar a 2014 para que los países de la eurozona vean crecer su PIB el 1,4 %.

Con la advertencia de que "las condiciones de la economía europea son frágiles", la CE estimó que en el conjunto de la Unión Europea (UE) la actividad se contraerá el 0,3 % este año, pero crecerá el 0,4 % y el 1,6 % en 2013 y 2014, respectivamente.

Alemania será el motor que tire de la economía de los países de la zona euro durante la travesía del desierto del próximo año.

"El crecimiento alemán es relativamente sólido" para 2012 y 2013, afirmó Rehn al presentar esos datos, al tiempo que admitió que "la economía germana no se escapa de la ralentización, aunque sus principales fundamentos se mantienen favorables".

Según la CE, la "locomotora" de la economía europea crecerá este año y el siguiente el 0,8 %, para subir hasta el 2 % en 2014, mientras que su déficit público bajará al 0,2 % al término de este ejercicio y del de 2013, para alcanzar el equilibrio (0 %) un año después.

En el caso de España, la CE estimó que su economía tendrá en 2013 una contracción del 1,4 %, similar a la que se espera para este año, y que su déficit público se situará en 2012 en el 8 % del PIB (un punto menos si se descuentan las ayudas a la banca), bajará al 6 % en 2013 y repuntará al 6,4 % en 2014.

Para la economía gala las proyecciones de Bruselas se redujeron al 0,4 % el próximo año, la mitad de lo que prevé el Gobierno del presidente François Hollande, al que también advirtió de que con esa evolución puede no ser capaz de cumplir con los compromisos de reducción del déficit público pactados con sus socios.

En ese ambiente de atonía generalizada la demanda interna tampoco se va a recuperar hasta 2014, "frenada por el desendeudamiento en curso en algunos Estados miembros y por la redistribución de los recursos entre los sectores".

Rehn advirtió de que ello tendrá también repercusiones para el mercado laboral europeo, que seguirá con unas tasas de desempleo "inaceptablemente" elevadas, y que en la eurozona serán del 11,3 % este año, para repuntar en 2013 al 11,8 % y bajar una décima hasta el 11,7 % en 2014.

A ese respecto advirtió de que si la situación del mercado laboral sigue deteriorándose, también lo harán la confianza y las perspectivas de crecimiento.

En cuanto a la evolución del saneamiento fiscal, la CE consideró que hay "progresos, pero son lentos", y estima que en la eurozona los déficit públicos caerán al 3,3 % en 2012 y al 2,6 % en 2013.

"Europa atraviesa un periodo de difícil reequilibrio macroeconómico que todavía durará algún tiempo", señaló Rehn, que también valoró que los países han tomado ya decisiones políticas importantes que permitirán que la confianza aumente.

Rehn se refirió también a la tregua que han dado los mercados, pero aseguró que "es muy pronto para alegrarse. Europa tiene que seguir combinando políticas presupuestarias sanas y reformas estructurales para tener un crecimiento duradero y reducir los elevados niveles de desempleo". EFE

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