Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 3 jun (Reuters) - El número de estadounidenses que presentó nuevas solicitudes de beneficios por desempleo cayó por debajo de 400.000 la semana pasada, por primera vez desde que comenzó la pandemia de COVID-19 hace más de un año, lo que apunta al fortalecimiento de las condiciones del mercado laboral.
Eso fue resaltado por otros datos del jueves que mostraron que las nóminas privadas aumentaron al máximo en 11 meses en mayo, impulsadas por una fuerte demanda en medio de una rápida reapertura de la economía.
Los datos respaldaron las expectativas de que el crecimiento del empleo se hubiese acelerado en mayo, aunque la escasez de trabajadores y materias primas sigue amenazando la recuperación del mercado laboral.
"La reapertura económica continúa y debería ser positiva para el crecimiento del empleo", dijo Rubeela Farooqi, economista en jefe para Estados Unidos de High Frequency Economics en White Plains, Nueva York. "Pero los desequilibrios de oferta y demanda están creando fricciones en el mercado laboral que podrían ser un obstáculo en el corto plazo".
Los pedidos iniciales de beneficios estatales por desempleo cayeron en 20.000 a un nivel desestacionalizado de 385.000 para la semana al 29 de mayo. Fue la lectura más baja desde mediados de marzo de 2020, cuando se impusieron cierres obligatorios de negocios no esenciales para frenar la primera ola de infecciones por coronavirus.
Economistas consultados por Reuters estimaban 390.000 solicitudes para la última semana. La quinta disminución semanal consecutiva fue liderada por Texas y Florida.
Las solicitudes han caído desde un récord de 6,149 millones a inicios de abril de 2020. Sin embargo, se mantienen muy por sobre el rango de 200.000 a 250.000 que se considera compatible con las condiciones saludables del mercado laboral.
Podrían disminuir aún más ya que los gobernadores republicanos en al menos 24 estados, incluidos Florida y Texas, están finalizando los programas de desempleo financiados por el gobierno federal para los residentes a partir del próximo sábado.
La pandemia de COVID-19 está cediendo debido a la vacunación, lo que permite a las autoridades levantar las restricciones a las empresas y acelerar la reapertura de la economía. Eso ha llevado a un aumento en la demanda que está presionando contra las limitaciones de la oferta.
Pero la contratación parece haber mejorado en mayo, con el Informe Nacional de Empleo de ADP mostrando que las nóminas privadas se incrementaron en 978.000, la mayor alza desde junio del año pasado, tras aumentar 654.000 en abril. Economistas estimaban un crecimiento de 650.000 puestos de trabajo en mayo.
Los pronósticos para el dato de nóminas no agrícolas que se conocerá el viernes fueron atenuados por datos del martes que mostraron una moderación en la contratación en las fábricas, con los manufactureros quejándose de que el ausentismo laboral y los cierres a corto plazo debido a la escasez de piezas y trabajadores estaban limitando el potencial del sector.
Los trabajadores son escasos pese a que casi 10 millones de estadounidenses están oficialmente desempleados. Se ha culpado a los generosos beneficios de desempleo financiados por el gobierno, los problemas con el cuidado de los niños y los temores de contraer el virus, así como las jubilaciones relacionadas con la pandemia.
Otro informe del jueves de la firma global de reubicación Challenger, Gray & Christmas mostró que los recortes de empleos anunciados por empleadores con sede en Estados Unidos aumentaron un 7% el mes pasado a 24.586. Sin embargo, los despidos disminuyeron un 93,8% frente a mayo de 2020. Los empleadores han anunciado 192.185 recortes de empleo en los primeros cinco meses de este año, un 86% menos que en el mismo período de 2020.
(Reporte de Lucia Mutikani, Editado en Español por Manuel Farías)