Panamá, 28 feb (EFE).- El Gobierno y los indígenas del occidente de Panamá, que protestaban contra una reforma minera, llegaron a un principio de acuerdo para desbloquear las vías que los nativos mantenían cerradas por tres días, informó hoy una fuente oficial.
En el acuerdo, que consta de seis puntos, el Gobierno panameño, que preside Ricardo Martinelli, se compromete a crear una ley que prohíba explícitamente la exploración y explotación minera en los territorios indígenas y a liberar a los detenidos en las protestas del pasado fin de semana.
Además, se acordó la instalación de una comisión de alto nivel, integrada por representantes del Gobierno y de la Coordinadora indígena y que se dé inicio al diálogo el 1 de marzo en San Félix, en la provincia de Chiriquí, para analizar artículo por artículo la Ley 8 de 2011 (que reforma la ley de minería).
En el acuerdo, las autoridades gubernamentales se comprometen a no tomar represalias contra los dirigentes de la Coordinadora indígena y el apoyo por parte del Gobierno a los afectados tras los disturbios del pasado sábado; y la designación de la Iglesia católica como mediadora y garante del diálogo.
A su vez los aborígenes se comprometieron a reabrir las vías que mantenían bloqueadas desde el viernes y a participar desde mañana, martes, en un diálogo con el Gobierno.
Tras la firma anoche de este acuerdo en San Félix, entre el ministro de la Presidencia, Jimmy Papadimitriu, que encabezaba una delegación oficial, y representantes indígenas, los nativos desbloquearon la carretera Panamericana en las provincias occidentales de Chiriquí y Veraguas, que por tres días estuvo cerrada, lo que ocasionó el atasco de centenares de automóviles, autobuses y camiones de carga.
Las protestas de indígenas, que integran la Coordinadora por la Defensa de los Recursos del Pueblo Ngäbe Buglé y Campesinos, era para exigir la derogación de la Ley de reforma al Código Minero que, aseguran, atenta contra los recursos naturales en las comarcas.
El presidente panameño, Ricardo Martinelli reiteró hoy, en el inicio del año escolar, que las protestas de los indígenas no se justificaban porque no habrá explotación minera en las comarcas en lo que resta de su gestión, al tiempo que lamentó todos los incidentes que se registraron el pasado fin de semana.
El Gobierno panameño defiende la Ley de reformas mineras, entre otros puntos, porque aumenta la regalía por extracción de cobre, oro y plata, de 2 % al 5 %; penaliza la minería ilegal con multas de hasta 250.000 dólares, y sube las fianzas en las concesiones de exploración de 10 centavos de dólar por hectárea a 50 dólares. EFE