Nueva York, 18 mar (EFE).- Los abogados de Argentina dirigieron hoy un memorando de ley al juez Thomas Griesa, que lleva en Nueva York el caso por fondos especulativos que poseen deuda en cese de pagos desde 2001, para solicitar que no se agreguen al litigio los tenedores de bonos que no impusieron la demanda desde el principio.
Estos demandantes, conocidos como los "me toos" ("yo también") quieren conseguir los mismos beneficios que los llamados "fondos buitres", liderados por NLM Capital y Aurelius, que cuentan con una sentencia en firme, según la cual Argentina les tiene que pagar 1.300 millones de dólares más intereses por títulos que entraron en cese de pagos en 2001.
"Ha llegado el momento de que el tribunal marque el límite de demandantes", asegura el texto, en el que se hace el cálculo de que, entre los más de 500 "me toos" se ampliaría la deuda a más de 5.400 millones de dólares.
Según los abogados defensores, liderados por Carmine Boccuzzi y Jonathan Blackman, la reacción que esta demanda ha provocado sobre otros tenedores de bonos que no aceptaron dos procesos de reestructuración, demuestra que "tal y como había vaticinado la República Argentina, las compuertas están ahora abiertas".
Desde hace casi tres años, Argentina se ha negado a pagar a los "fondos buitres" las cantidades que exigen, entre otras cosas para evitar la posibilidad de que alguien más se sume a la demanda.