São Paulo, 25 jun (.).- El economista Gabriel Zucman, uno de los mayores expertos mundiales en fiscalidad, presentó este martes un informe encargado por la Presidencia brasileña del G20 en el que se detalla una propuesta de impuesto global mínimo sobre los ingresos de los ultrarricos.
La propuesta es que alrededor de 3.000 multimillonarios paguen por lo menos el 2 % de su riqueza, frente al 0,3 % actual, lo que ayudaría a los gobiernos a recaudar entre 200.000 y 250.000 millones de dólares anualmente en todo el mundo.
Zucman afirmó durante una rueda de prensa que la "coordinación" entre países es un "instrumento poderoso" para lograr recortar la desigualdad y dijo que el impuesto es "técnicamente viable" y puede ser puesto en práctica de forma exitosa.
Aunque el profesor asociado de la Universidad de Berkeley (LON:BKGH) en Estados Unidos reconoció que evaluar la riqueza de los ultrarricos es un desafío, dijo que alrededor de la mitad se encuentra en acciones de empresas que cotizan en bolsa, lo que facilita el trabajo.
"La idea es establecer un estándar común que permita la implementación doméstica por parte de los países. No requerirá un nuevo tratado multilateral", manifestó.
Según el economista francés, ya hay varios países que han expresado su apoyo a la propuesta, entre ellos España, Francia, Colombia y Sudáfrica, además de Brasil.
"El informe es un documento técnico cuyo objetivo es alimentar el debate, mostrar el abanico de posibilidades. Ahora empezará la discusión política", afirmó.
El Gobierno brasileño pretende debatir sobre el impuesto con otros miembros del G20 de cara a la cumbre que se celebrará en Río de Janeiro en noviembre, momento en el que el país latinoamericano le pasará el relevo a Sudáfrica en la Presidencia del grupo.
El coordinador general de Asuntos Financieros Internacionales del Ministerio de Hacienda brasileño, Felipe Antunes de Oliveira, dijo durante la rueda de prensa que hay "mucho interés" en la propuesta, pero que es difícil saber cuán rápido avanzarán las conversaciones para llevarla a la práctica.
"Entre los países podemos esperar que las negociaciones sean largas, pero tenemos que seguir caminando", aseguró.