Lisboa, 18 dic (EFE).- Álvaro Sobrinho, ex presidente de la filial del Banco Espírito Santo (BES) en Angola, el BESA, negó que el banco africano haya provocado el descalabro de la matriz BES y desveló que transfirió 14 millones de euros al ex responsable del BES, Ricardo Salgado, como regalo de parte de un constructor.
En la comisión parlamentaria que investiga el derrumbe del BES, Sobrinho dijo que un crédito del BES al BESA de más 3.000 millones no sirvió para financiar a la filial de Angola, pues tenía como objeto apoyar operaciones de empresas portuguesas exportadoras con la propia Angola.
"Decir que este dinero salió para financiar el BESA no es verdad. El dinero se quedó BES Portugal", aseveró, y explicó que "el crédito era para el BESA, pero en el BES recibían ese dinero".
El expresidente del Banco Espírito Santo, Vítor Bento, su antecesor, Ricardo Salgado, y la auditora KPMG han subrayado en la misma comisión del Parlamento que la exposición crediticia de 3.300 millones era "anormal" y fue crucial para dictaminar la escisión del BES en una parte "buena", Novo Banco, y otra, mala.
"Soy culpable, soy responsable, y si pudiese volver atrás, tal vez podría haberlo hecho mejor", dijo al entonar el mea culpa el gestor angoleño.
Sobrinho, cuadro del banco hasta el 2013, reconoció además que fue el responsable de transferir 14 millones de euros a Salgado en nombre del constructor portugués José Guilherme en agradecimiento de consejos de inversión.