Pekín, 18 mar (EFE).- Las empresas de la Unión Europea presentes en China pidieron hoy a Pekín que no caiga en la tentación de sacrificar su proceso de reformas en aras de mantener a toda costa el crecimiento económico.
La Cámara de Comercio de la UE en China reconoció hoy en un comunicado los objetivos económicos incluidos en el plan quinquenal 2016-20 aprobado el pasado miércoles y que incluyen apostar por la innovación y la tecnología, reformar las empresas estatales y recortar el exceso de capacidad en algunos sectores.
Sin embargo, "sería perjudicial para China si los ambiciosos objetivos de crecimiento que ha fijado la Asamblea Nacional Popular se lograran a costa de la agenda de reformas", advirtió la Cámara.
China se ha marcado un crecimiento anual del PIB de al menos el 6,5 % para los próximos cinco años, a la vez que realiza un ambicioso proceso de reforma de su industria pesada, especialmente en las empresas estatales, que supondrá la pérdida de 1,8 millones de empleos solamente en la siderurgia y la minería de carbón.
Las empresas europeas advierten contra una posible tentación de las autoridades para no recortar el exceso de capacidad de producción de la industrias no competitivas, "que producen bienes de baja calidad para los que no hay demanda".
"Sin reformas estructurales, la política monetaria acomodaticia y la fiscal agravarán aún más los actuales problemas de China", añade la nota.
Por ello, las empresas europeas urgen a las autoridades chinas a no retrasar nuevas medidas de apertura, tanto a productos como a la inversión procedentes del extranjero. Así, piden "una genuina apertura del mercado basado en la demanda de los consumidores, no en políticas de planificación".