Washington, 26 may (EFE).- El vicepresidente de la Reserva Federal (Fed), Stanley Fischer, señaló hoy que la "debilidad" económica global podría ralentizar el ritmo de la normalización monetaria en Estados Unidos, donde se espera una primera subida de los tipos de interés antes de finales de año.
"Si el crecimiento global es más débil del anticipado, las consecuencias para la economía estadounidense podrían llevar a salir de la política monetaria expansiva más lentamente de lo que se haría de otro modo", indicó Fischer en su discurso preparado para pronunciar en la Universidad de Tel Aviv (Israel).
El inicio del ajuste monetario en EE.UU., después de años de expansión sin precedentes, se mantiene para 2015, pero la fragilidad persistente mostrada por las economías de la zona euro y Japón y la ralentización de los emergentes ha aumentado la incertidumbre sobre las perspectivas globales.
Fischer, que cuenta con la doble nacionalidad israelí-estadounidense y fue presidente del Banco de Israel, reconoció que la economía de EE.UU. está "significativamente afectada por el estado de la economía mundial".
Asimismo, la recuperación en EE.UU, que había registrado un sólido ritmo en 2014, sufrió un traspiés en el primer trimestre de 2015, lo que ha apuntado a un retraso de unos meses en la esperada alza de tipos, actualmente entre el 0 y el 0,25 % desde 2008.
Los analistas esperan ahora la subida de tipos para no antes de septiembre. La última reunión de la Fed sobre política monetaria se celebrará en diciembre.
Fischer se refirió a los episodios de volatilidad registrados en el mercado de divisas en los últimos meses, especialmente en los mercados emergentes, ante la fuerte apreciación del dólar registrada.
Pese a reconocer los riesgos, Fischer se mostró optimista acerca del posible impacto de esta subida de tipos en EE.UU. y sus consecuencias en el resto del mundo.
"El alza de tipos podría desencadenar mayores capítulos de volatilidad, pero mi estimación es que la normalización de nuestra política monetaria debería ser manejable" para las economías emergentes, agregó el "número dos" de la Fed.
Fischer subrayó que "hemos hechos todo lo posible (...) para preparar a los actores del mercado para lo que está por venir".
La pasada semana la propia presidenta del banco central, Janet Yellen, insistió en que será "apropiado" adoptar una subida de los tipos de interés este año, que sería la primera desde 2006, si la economía continúa mejorando.
La tasa de desempleo ha descendido de manera continuada en EE.UU. y se encuentra ahora en el 5,4 %, la más baja desde el estallido de la crisis, en 2008.
La preocupación se concentra ahora en la baja inflación, que sigue en niveles muy inferiores a la meta a largo plazo del 2 % marcada por la Fed.
La próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés) de la Fed está prevista para el 16 y 17 de junio, tras cuya conclusión Yellen ofrecerá una conferencia de prensa.