Por Tetsushi Kajimoto
TOKIO (Reuters) - El gobierno japonés aprobó el jueves un presupuesto de gasto récord de 830.000 millones de dólares para el año fiscal 2017 que cuenta con unos tipos de interés bajos y un yen más débil para limitar el endeudamiento.
El presupuesto general de 97,5 billones de yenes (830.000 millones de dólares) para el año fiscal que comienza el 1 de abril representa un aumento de 733.000 millones de yenes desde el plan inicial, debido a una creciente factura de los servicios de seguridad social en un país que envejece rápidamente.
El plan presupuestario pone de relieve la lucha del primer ministro Shinzo Abe para recortar gastos, algo clave en su ambicioso objetivo de alcanzar un superávit presupuestario primario -excluyendo el servicio de la deuda y las nuevas emisiones de bonos- en el año fiscal 2020.
El Ministerio de Finanzas dijo que este presupuesto está orientado a reactivar la economía y lograr la consolidación fiscal, pero los analistas dicen que se necesita una reforma a fondo del gasto para restaurar las cuentas públicas.
"No podemos depender indefinidamente de un yen débil para aumentar los ingresos dado el riesgo de los repuntes de la moneda", dijo Takuya Hoshino, economista de Dai-ichi Life (T:8750) Research Institute. "Para equilibrar el presupuesto, hay que revisar el gasto a través de una reforma a la asistencia social
que podría ser dolorosa para los ancianos", agregó.
El Gobierno planea mantener la nueva emisión de bonos ligeramente por debajo de los 34,43 billones de yenes previstos inicialmente este año, asumiendo que la recaudación fiscal será buena por la previsible mejora de los beneficios de las empresas que traerá la por la debilidad del yen, y por la mayor rentabilidad de las reservas en el extranjero.
El Gobierno basa su estimación de los ingresos tributarios en sus proyecciones para el crecimiento nominal de la economía de un 2,5 por ciento y de una expansión real de un 1,5 por ciento, más optimistas que las previsiones de los economistas del sector privado.
"El gabinete de Abe no está persiguiendo la austeridad, pero nuestro objetivo es llegar a un equilibrio (del presupuesto) mediante la expansión de la economía", dijo el ministro de Finanzas, Taro Aso, a la prensa. "Nos estamos moviendo en la dirección correcta", agregó.