París, 18 dic (.).- La economía francesa crecerá un 1,5 % este año, según el Instituto Nacional de Estadística (INSEE), dos décimas menos del objetivo del Gobierno hasta incorporar el impacto de las protestas de los "chalecos amarillos".
En su informe trimestral de coyuntura publicado hoy, el INSEE estima que esas protestas restarán una décima a la progresión del producto interior bruto (PIB) en el cuarto trimestre, que se quedaría en un 0,2 %, cuando anteriormente había anticipado un ascenso del 0,4 % entre octubre y diciembre.
El instituto estadístico también revisa a la baja en una décima su cálculo sobre el producto interior bruto (PIB) en el tercer trimestre, que aumentó un 0,4 %.
Tras la ralentización en los tres últimos meses de 2018, estima que el PIB progresará un 0,4 % en el primer trimestre del año próximo y un 0,3 % en el segundo.
Sobre la base de esas cifras en el primer semestre -y con la hipótesis de una inflación limitada al 1 %-, la economía francesa crecería un 1 % en 2019 si en la segunda mitad del ejercicio la actividad permaneciera estancada.
Los autores del informe estiman que en el primer semestre del año próximo se crearán 64.000 empleos netos (tras 107.000 en 2018), lo que permitirá disminuir la tasa de paro sólo muy ligeramente: del 9,1 % actual al 9 % al terminar la próxima primavera.
Por lo que respecta al poder adquisitivo en Francia, el INSEE cree que subirá un 1,4 % en 2018, como el año precedente, para acelerarse el ritmo a continuación hasta un 2 % a mediados gracias a una inflación menor.